Capítulo 25: Nueve

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- O durmiendo - Burló el del parche.

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Casa de Argentina y las provincias

- UUH WACHO APURATE - Gritó Córdoba a Entre Ríos, encargado de hacer la ensalada rusa. - ¡Pampa dale! ¡Trae la carne afuera! - Volvió a gritar, viendo a sus hermanos en la cocina hacer las ensaladas, a Tucumán, Jujuy y Salta usar hornos que trajeron para hacer todas las empanadas, Buenos Aires cortar para la picada y sus demás hermanos ordenando las cosas que ensuciaban los demás.

Ellos se habían despertado a las 7 en punto, pues debían cocinar todo rápido y preparar las cosas. Argentina quiso ayudar, pero no lo dejaron, pues tenía que calmarse ya que estaba nervioso.
Pasó el tiempo, para casi las once de la mañana tocaron el timbre y toda una "patota" de gente estaba fuera.

- EA - Gritó con felicidad Córdoba. - Pasen pero en silencio, sh - Pidió, haciendo que todos los amigos del país entren calmados. - Vamos atrás, así tomamos aire antes de que llueva - Sonrió.

La casa era muy grande, de lado a lado, de arriba a abajo, inclusive el patio. Atrás, donde se encontraba la parilla cual quinta, había un playon de cemento con techo (algo para las familias pequeñas, no como ellos).
Antes de poder salir, todos escucharon una gran carcajada, una que creían no oirían nunca más. Salieron detrás de Córdoba, amontonandose y viendo a Argentina charlar con alguien.

- Que onda - Saludó sonriente.

- ¡ARGENTINA/ARGIE! - Fue el grito más fuerte que se pudo oír.

Todos se acercaron al albiceleste (quien se levantó del banco largo) para abrazarlo. Cerca de la salida al patio quedaron Rusia, Alemania, Runia y Venebia, pues niños como Urica, Boguay y Colozuela estaban siendo cargados por sus padres.

- Hey hey, lo asfixiaran - Bromeó FBI, quien se encontraba desde temprano allí.

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- Vos vení, los chicos están cocinando y no me dejaron ayudar - Hizo pasar a la organización, llevandola hasta la parte trasera de la casa. - ¿Querés picar algo? ¿Tomar? Creo que le podemos pedir una Quilmes a Río Negro - Se sentaron, para charlar más cómodos.

- Jaja, veo que será un gran día - Dijo, viendo con suma atención aquella parte de la casa.

- Si no llueve sí - Vió el nublado cielo. - Che, re temprano te viniste, son recién las 8 y algo - Rió levemente.

- No tenía mucho que hacer sabes? - Sonrió FBI.

- Te la vas a pasar re bien, ya vas a ver - Argentina le guiñó, sonriendo.

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- ¡No vuelvas a dejarnos así marico! - Dijo Venezuela, quien le había pasado la niña a Colombia.

- ¡Argie! ¡Nos preocupaste mucho! - Habló ésta vez Perú, quien al igual que Venezuela y Uruguay estaban colgados de Argentina.

- Ya ya, dejenme - Pidió, haciendo que se alejen. Vió a todos, felices de verlo y él lo estaba, los había extrañado.

Charlaron un poco, o intentaron pues alguien llamó a la puerta. C.A.B.A. fue a abrir, pues había terminado su parte de los quehaceres.

Amor a la... [Countryhumans]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora