"Reunión Familiar"

Start from the beginning
                                    

—Mamá —me acerqué a ella y la abracé de la misma forma en la que un momento antes mi padre la había abrazado a ella—, no es solo tu culpa, tomaste malas decisiones. Todas las personas han cometido ese error dos o más veces, yo también lo he hecho, sé lo que es tomar decisiones erróneas por amor.

Mi padre me abrazó con mucha fuerza, sabía exactamente de qué equivocaciones estaba hablando, sabía perfectamente porqué estaba así y porqué mencionaba esto; y era el momento que yo me abriera, tal y como ella lo había hecho. A veces es bueno hablar de las malas pasadas en voz alta, así algunos dolores internos salen a la luz y ya no eres tú únicamente la que lidia con el peso de ellos.


...

—Papá, estoy preocupada por Luca, no me responde los mensajes, ni las llamadas y yo... realmente tengo mucho miedo —le solté a mi padre tomando enormes bocanadas de aire entre palabras. Mi corazón dolía con fuerza al recordar la imagen de ese par de ojos mieles que me vieron invicta en ese estúpido robo en el que me metí por confiar en el chico que amaba; porque sí, Rod me había engañado y ese día no habíamos ido por un par de cosas prestadas como me lo había descrito él. 

Habíamos entrado a robar y yo no tenía la menor idea de nada; recordaba claramente el dolor traspasando aquel par de cristales al verme y yo al verlo a él mientras observaba todo desde el jardín de su propia casa.

—Deberías ir a verlo —me recomendó mi padre y yo apreté los labios aferrándome más a la llamada que estábamos teniendo, puesto que en ese momento papá había salido a solucionar una situación de último momento en su empresa, algo con un par de inversionistas o parecido. La cosa es que yo me había quedado sola en casa—. Sé que es duro para ti enfrentar tus problemas cara a cara, pero creo que es la única manera ahora.

Me mordí el labio inferior con fuerza e intenté armarme de valor y seguir el consejo de mi padre, asentí con la cabeza aunque sabía que no podía verme, y colgando la llamada después de despedirme, tomé mi anorak blanco y me dispuse a salir a la calle. Tomé las llaves del cuelga llaves y salí de la casa con la brisa de la tarde a pocas horas de llegar a su fin, golpeándome el rostro y desordenando mi cabello.

Caminé un par de cuadras y justo cuando estaba en la esquina de la calle donde hasta ahora me había enterado que estaba la casa de mi amigo, escuché que me llamaron a lo lejos.

—¡Waverly! —me giré extrañada y fue cuándo vi a Rod corriendo hacia mí completamente agitado.

—¿Qué demonios haces aquí? —Le grité enfurecida empujando su pecho con todas las fuerzas que tenían mis manos, enviado su cuerpo hacia atrás—. ¡¡Claramente te dije que no te quería volver a ver en toda tu asquerosa y desalmada vida!!

Rod frunció el ceño y me miró con sus ojos verdes inyectados en dolor e ira contenida.

—Tú no me puedes botar como si fuera cualquier basura de la calle Waverly. No puedes terminar conmigo solo por ese jodido malentendido —apretó la mandíbula con fuerza y podía jurar que escuchaba claramente sus dientes crujiendo dentro de su boca, como si estos fueran a romperse en cualquier momento.

—¡Solo por un jodido malentendido! ¡Solo por un jodido malentendido! —Lo empujé nuevamente a punto de gritar o de abofetearlo—. ¿¡Para ti un robo y el hecho de que casi termino presa por tu culpa puede catalogarse como un jodido malentendido!?

Iba a levantar la mano para golpearlo cuando escuché un grito a lo lejos que terminó por poner todas mis terminaciones nerviosas en alerta mientras el pánico se instalaba en mi pecho de manera aterradora y brusca.

Entre Recuerdos Y ArmasWhere stories live. Discover now