—Entiendo —asentí—. Ahora, si no sabes qué hacer, ¿puedo seguir leyendo?

—Eres tan aburrida —bufó.

—Haríamos otra cosa si a ti se te ocurriera algo.

—Tengo algo en mente. Pero no creo que te guste hacerlo —dirigiéndome una sonrisa pícara, Jisoo se sentó y pasó suavemente su mano por mi muslo.

—¡Yah! ¡¿Q-qué crees que haces?! ¡Aléjate de mí! —chillé, sonrojándome y pateándola para que me dejara en paz.

Jisoo soltó una risa y dejó de pasar su mano por mi piel.

—Te dije que no te gustaría.

—Eres una-

—¡Rosie Pooh! 

De inmediato dejé de observar a Jisoo y mi vista se posó esta vez en cierta rubia que venía corriendo hacia mí con una adorable sonrisa en su rostro. 

Ajusté mis lentes y le sonreí de vuelta cuando ella se tiró al suelo y me envolvió entre sus brazos con ternura.

—Hola Lili.

—Lisa, te dije que no corrieras tan rápido, joder —Jennie jadeó y negó con la cabeza mientras tomaba asiento junto a Jisoo.

—Lo siento, quería ver a mi Rosie —se disculpó, haciéndome sonrojar ante el apodo.

—No es como si no la hubieses visto, ¿sabes?

—Ya, pero quería verla otra vez —sacando su lengua, Lisa se acurrucó a mi lado, pasando una mano por mi cintura y apoyando su mentón en mi hombro.

—Son tan empalagosas —soltó Jisoo, haciendo una mueca de asco que Jennie imitó.

—Concuerdo.

Lisa las ignoró y se dirigió a mí esta vez con voz dulce.

—¿Qué haces? 

—I-intentaba leer —contesté, sintiéndome nerviosa ante su proximidad—. Pero Jisoo no me dejaba así que... Solo hablábamos.

—Luego le hice una propuesta indecente que ella rechazó —agregó Jisoo con falsa tristeza—. Me ofrecí a ella como un tributo y simplemente se negó.

Rodé los ojos por su dramatismo cuando Jennie se acercó a Jisoo y pasó un brazo por sus hombros.

—¿Por qué querrías hacerlo con Rosie? —sorprendentemente, Lisa fue quien preguntó.

—¿Por qué no? ¿Acaso la has visto? Rosie está tan buena como un pernil de pollo.

—Tú ya tienes a Jennie.

—Cierto —concordó Jennie, asintiendo y atrayendo más a Jisoo a sus brazos—. Puedes tenerme cuando sea, Jichu.

—Excelente.

Sonriendo, Jisoo se acurrucó en el pecho de Jennie.

Lisa y yo intercambiamos miradas. Esas dos son tan... Extrañas. Primero dicen que mantendrán su distancia, luego se pelean y después están abrazándose como si nada. ¿Quién las entiende?

—¿No que actuaban de acuerdo a los términos? —preguntó la rubia con burla.

—Nunca dijimos que no podíamos abrazarnos. No estamos haciendo nada sexual, ¿entienden? Los amigos se abrazan —contestó Jennie.

—Sí, no tiene nada de malo. Ahora cállense para que pueda dormir.

—¿Qué? Pero tú dijiste que- 

Promise┊ChaelisaWhere stories live. Discover now