¿Qué coño hace él aquí?
Y tal como si hubiera leído mis pensamientos, habló:
-Vine porque tu madre me dijo que mañana te ibas de viaje con Jason y quise despedirme-Me abrazó.
Miré con cara de "ayuda, por favor" a mi madre y a Jason mientras me lo quitaba de encima.
-Eh...Esto. Sí papá. No hace falta que vengas a despedirte.
-¡Cómo que no! Te voy a echar mucho de menos, mi niñita...-Y volvió a abrazarme.
De repente mis sentimientos se pintaron de negro y la parte enfadada de Angie salió a la luz.
-¿Cómo tienes la cara de decirme que me echas de menos si apenas te he visto unas diez veces en TODA mi vida? Es que no te das cuenta de nada, papá. Eres prescindible en mi vida. La verdad, no me importas. Yo no quiero verte, nunca más. Ya estoy acostumbrada a ello. ¿Qué más da? Mi madre me ha dado todo el amor que tú no me diste y que nunca me darás. Así que por favor- señalé la puerta- Vete y no vuelvas. O al menos no vuelvas para verme a mí.
¿Y lo a gusto que me he quedado?
-Angie...-Dijo mi madre con tono cálido- Tranquila.- Posó su mano en mi hombro.
Jason solo se limitaba a ver la conversación.
Mi padre...Bueno. Él había entrado como en una especie de "shock" mientras le hablaba. Al terminar, reaccionó.
-Bueno...Eh...-Una lágrima se deslizó por su mejilla. Qué falso.- Yo me voy. - Pasó su dedo índice por su cara, limpiándo así su "lágrima de cocodrilo" y se fue sin decir palabra.
Mi madre no le detuvo y Jason, claramente, no dijo nada.
Yo subí corriendo a mi habitación.
A los pocos minutos se abrió la puerta.
-Angie, cielo. ¿Estás bien?- Dijo Jason sentándose en mi cama.
Bueno, por lo menos tiene ese detalle de venir a preguntarme. Se preocupa por mí, eso es bueno.
-Oh sí, perfectamente. No sabes lo aliviada que me he quedado- Reí- Solo que me molesta un poco que haya tenido que venir a fastidiar todo el día antes del viaje.
-Bueno, qué más da. Ya le has dicho lo que le querías decir y eso está bien. Es malo guardarse las cosas para uno mismo.
-Sep. Bueno, ¿Y mi madre?
-Está terminando de recoger. Dijo que esperaría a que se te pasara el enfado para venir a hablar contigo.
El conocimiento de mi madre sobre mí es perfecto.
-Oh vale.
-Cariño- Miró la hora- Son las diez. Mañana nos tenemos que levantar a...
-A las seis.- Terminé la frase.
-Sí. Entonces vayamos a dormir.
Nos dimos un cálido beso y nos acurrucamos en la cama.
Después de todo, haberle dicho a mi padre lo que pensaba desde hace varios años, ha sido genial.
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Hola :D Espero que os esté gustando el fanfic. Ya tengo el final pensado, pero creo que aún hay varios capítulos por hacer, relajad ~
Quería deciros que si queréis, os paséis por mi historia "Diana", que estoy a puntito de llegar a los 1000 lectores.
Gracias bellos camellos ;D
