Habían pasado varias semanas y Jason y yo cada vez nos conocíamos más.
Quedábamos todas las tardes en una cafetería que estaba casi en mitad del camino que iba de mi casa a la suya. Allí hablábamos, nos reíamos, escuchábamos música, nos desahogábamos. La tensión entre nosotros era cada vez mayor y yo necesitaba saber si él sentía lo mismo por mí. Jason es mi tipo.
[Mensajes de texto]
Angie: Jase, nos vemos hoy a las 4 en la cafetería. ¡No seas impuntual! :)
Jase: Claro Angie, allí te veo. ¡Y no mientas, la impuntual eres tú! Jajaja ;P
------------------
Llegué y vi a un chico de espaldas, con el cabello medio rizado, una camiseta blanca, vaqueros y zapatillas normales. Definitivamente es Jase.
Me acerqué sigilosamente y le tapé los ojos con mis manos.
El palpó mis manos y comenzó a reír.
-Angie, siempre haces lo mismo. Ya no tiene gracia- Continuó riendo.
-Oh, vaya- Quité las mano y él se giró. Miré su cabello y empecé a jugar con él- Me gusta tu cabello- Los dos sonreímos.
Se acercó a mi oído y me susurró -A mí me gusta otra cosa-
Sentí como mi corazón se detuvo y comencé a reír nerviosamente. Me apresuré en cogerle el brazo para entrar de una vez al café.
Jason, ya no aguanto más.
Vimos una mesa al fondo y decidimos ir allí.
-Jase, siéntate. Voy a pedir algo para comer, ¿qué quieres?-
-Un donut de chocolate. El que pido siempre- Sonrió. ¿Sabes lo que me enamora tu sonrisa?
Me acerqué a la caja y mi corazón se iba acelerando poco a poco.
-Deme un donut de chocolate y un café, por favor-
-Cinco euros, señorita- Dijo la cajera.
Cogí la bandeja y me dirigí a la mesa.
Vamos Angie, debes ser fuerte. Él te ve como una chica que no le teme a nada. Debes hacerlo ahora o si no vas a acabar explotando. Le conoces lo suficiente como para decirle. Vamos...Vam...
-Bien, ¿y por qué me citaste?- Preguntó Jason mientras cogía su donut.
-Bueno...Euh...-Respiré profundamente y restregué mis manos en el pantalón. Odio el sudor de mis manos. -Yo...Te quiero, Jase.