sʜᴏʀᴛ sᴛᴏʀɪᴇs [ᴛʏsʜ;;]

J05H04

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Las estrellas brillaban en lo más alto del cielo, su deslumbrante luz dejaba sorprendidos a aquellos dos chicos que se encontraban en uno de los bosques más lejos de la ciudad, el lugar favorito del castaño.

Tyler y Evan se encontraban sentados sobre una sábana roja, mirando las estrellas con una expresión seria en sus rostros, hace ya algunos meses habían tenido constantes peleas, su relación ya no era como antes y cada vez iba más hacia abajo, los gritos no paraban y los constantes celos de parte de Evan incrementaban cada vez más, era una de las razones por las cuales habían comenzado los problemas.

— Entonces...

— Ya te lo dije – el castaño pasó una de su manos por su rostro, tratando de ocultar la mueca triste que estaba plantada en el – lo mejor será terminar. – sentenció Tyler, dando un pequeño suspiro al final, todavía quería a Frank, era su novio y había sido una parte muy importante pero esa relación ya no daba para más.

— No quiero terminar, Tyler – hablo dolido el contrario, sus deslumbrantes ojos verdes estaban llorosos

— Será lo me-

— No, no lo será... Tyler, te quiero e incluso c-creo que – su voz se cortaba y Tyler enserio esperaba que no fuera lo que estaba pensado – no se, creo que te amo – y ahí estaba, decir te amo era algo muy fuerte, casi como una promesa y Tyler no lo había dicho ni una sola vez (solo a sus padres y familiares, claramente) y esta no será la excepción.

— Evan, lo siento, te quiero, enserio lo hago pero – una mueca se formó en sus rostro al observar como el contrario soltaba lágrimas, viéndolo directamente – lo siento, no te amo – un sollozo se escucho en medio del sepulcral silencio del bosque, captando la atención de los dos chicos ya que Evan no había sido quien sollozó.

— ¿Que mierda fue eso? – hablo rápidamente el de cabellos negros, mirando hacia alrededor.

Tyler se levantó de su lugar, estaba alerta, un sollozo más se escuchó, estaba lejos pero aún así era audible para él, miró al chico a su lado el cual parecía estar petrificado.

— E-Evan, tenemos que ver de qué se trata – hablo el castaño, volteando a mirar a su contrario el cual negó rápidamente.

— No, no, no, estás loco si crees que haré eso... Tyler, mejor hay que irnos, por favor – se podía notar el miedo en su voz, pero Tyler no iba a ceder, había alguien ahí y estaba llorando.

— No, tenemos que ir

— No, yo – un pequeño grito se escuchó a la lejanía acompañando de un sollozo más, Tyler volteó a ver a todos lados mientras que su novio retrocedía algunos pasos. — yo me voy de aquí – hablo rápido el pelinegro, dando alguno pasos más hacia atrás hasta poder llegar al auto, se recargó en la puerta del piloto y le grito a Tyler.

— Iré a ver qué pasa – un sollozo más se escuchó, sonaba como una voz lastimada – no dejare a quien está ahí

— ¿Y a mi si me dejaras?

— ¡Hay alguien en problemas, joder! – grito molesto ante el comportamiento del contrario, mirándolo directamente.

Aquella miradas duraron poco, hasta que el de cabellos negros entró al auto y encendió este, acelerando para irse de ahí lo más rápido posible. Tyler se quedó con los ojos bien abiertos, no pensó que aquel chico fuera capaz de dejarlo ahí solo.