Una ducha diferente [Dramione]

Capítulo 22

— Yo... ¡me tengo que ir! ¡Me llaman!

"Cobarde, cobarde, cobarde..." se replicó mientras salía corriendo, contestando a la llamada de Luna, quien la había avisado del teléfono. El teléfono... por dios, ¡Que mala excusa!

Bien habría podido decir que llamara después, pero tenía que reconocerlo: Era una persona cobarde, que había salido huyendo.

¡Uff! ¿Y cómo no iba a hacerlo después de aquella... proposición?

Le temblaban las manos y las palabras de Draco resonaban en su mente. ¿Le había propuesto algo más formal? ¿Novios? No recordaba la última vez que había utilizado aquella palabra... novio.

A lo mejor... quizás la propuesta había sido para salvarla de Luna... quizás había pensado que si le decía a su hermana, que eran algo formal, no la interrogaría. Pero lo haría y lo querría saber todo... cada detalle.

— ¿Quién es? — le preguntó a la rubia, cogiendo el teléfono inalámbrico.

— Nadie, pero como no venías decidí meterte un poco de prisa.

— ¿Qué? ¡Oh, Luna, eres una asquerosa! ¿Cómo haces eso?

— Creo que tengo derecho a hacerlo — replicó la rubia sentándose y cruzando las piernas.

— Ya...

— No te quejes. Y ahora... haz el favor de decirme lo que hacías... en la piscina. ¡Con mi hermano! — exclamó abriendo los brazos — bueno. No, no, no y no. No me lo cuentes, tuve bastante con presenciarlo. Solo... uhm... bueno ya sabes. Cuéntame los detalles de cómo pasó.

Hermione se sonrojó.

— No sé cómo llegamos a ese momento... solo pasó.

— ¡Oh! Interrumpí vuestra primera vez... — se quejó — ¡Mierda!

— No te preocupes, Luna... — murmuró la chica — no era la primera....

— ¡Qué! ¡Ohh, eres una maldita, Hermione! ¡Te has acostado con mi hermano y no me has dicho nada!

— Joder Luna. Hablas como una maldita novia celosa... No tenía por qué decirte nada...

— ¿Ah, no? ¡Soy, tu mejor amiga desde hace años! ¡Tú compañera de casa! Tú confidente, como tú eres la mía... ¡Venga hombre, nos lo contamos todo! Esto no es una excepción.

— Es tú hermano — se quejó ella.

— ¿Y...? Sigo queriendo saberlo... me intereso por ti...

— No. Lo que eres es una cotilla de cuidado.

— Me voy a tener que sentir ofendida... — se quejó ella, sombría.

— ¡No te enfades! — dijo la castaña abrazándola y mojándola entera.

— ¡Hermione! — Gritó — mi ropa ¡Que me la vas a estropear con el maldito cloro!

— Lo siento, lo siento — se disculpó la castaña alejándose un poco y echándose a reír.

— No tiene gracia...

— Perdóname...

— Con una condición.

— ¿Cuál? — preguntó enarcando una ceja.

— Que me cuentes... todo.

Hermione soltó un suspiro y se resignó. Si al final... se lo iba a contar.

— Vamos al cuarto de baño. Creo que necesito una ducha... 

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¡Oficialmente empieza el maratón de un capítulo por día! ♥