Mi Dulce Albañil Piropero |Michaeng|

Soulmate, Miracles & Butterfly Effect

Iba a subir las escaleras pero la rubia me detuvo guiándome al patio, ahí la vi sentada debajo de un árbol.

Mi corazón se encogió al recordar que cuando éramos más jóvenes, solíamos venir después de clases y pasar toda la tarde bajo ese árbol hablando hasta que anochecía.

– Me la cuidas, eh – me dijo Yerim dándome unas palmadas en la espalda.

– ¿Qué? ¿Dónde irás? – pregunté y ella rió.

– Mi turno como niñera acabó – bromeó – sé lo mucho que Chaeyoung ama pasar tiempo a solas contigo, además no quiero ser la vela y presenciar sus cursilerías, no he traído mi dosis de insulina – reí levantarme ante sus bromas.

– ¿Es eso o verás a alguien? – levanté mis cejas y me burlé en silencio al ver como sus mejillas se enrojecían.

– E-eso... yo... adiós, despídeme de Chaeyoung – dijo rápidamente para desaparecer de mi vista.

Suspiré y me acerqué a mi pequeña chica que estaba concentrada dibujando.

– ¿Qué haces? – pregunté sentándome a su lado y riendo cuando dió un pequeño brinco.

– Carajo – se quejó con una mano en el pecho – debes dejar de hacer eso, un día me dará un ataque cardíaco – giré los ojos, tan exagerada.

– Bueno, podré aplicarte RCP si eso pasa – comenté encogiéndome de hombros.

– ¿Con respiración boca a boca incluido? – preguntó coquetamente y golpeé su brazo al momento que mi rostro se encendía.

– Idiota – canturreé y escuché su bella risa, amaba escucharla.

Nos quedamos en un silencio bastante cómodo, escuchando algunos cantos de pájaros y el sonido que hacían las ramas de los árboles cuando el viendo corría. Era algo bastante acogedor.

– Tan linda – la escuché decir y giré mi cabeza para mirar esos ojos grises que me volvían loca – no quiero que pienses en nada – fruncí el ceño – sé que sigues pensando en todo lo que pasó, pero ya es pasado, olvídalo – dijo suavemente y suspiré, tiene razón pero esos recuerdos me atormentarán por el resto de mi vida – y no digas ni una palabra – me frenó cuando abrí mi boca para responder – sólo dame una sonrisa, amo verte sonreír – dijo tímidamente y no pude evitar darle la sonrisa que tanto quería ver.

Aún no puedo creer que me encuentre en este momento junto a ella, todo esto se siente como un sueño, sólo espero no despertar y que todo desaparezca.

– ¿Es verdad? – pregunté mirando al frente sintiendo mis mejillas arder – eres tan hermosa que tengo miedo – susurré y sentí su mirada sobre mí.

– Falso – afirmó y la miré confundida – tú lo eres – sonrió tiernamente haciendo que su hoyuelo se pronuncie.

Fallecí.

– Mina... – habló luego de un rato tomando mi mano – ¿te quedarás conmigo? – preguntó con sus ojitos brillosos y rápidamente asentí – ¿me lo prometes? – su voz temblaba y pude notar miedo en su mirada.

– Lo juro – dije segura entrelazando nuestros dedos – si dejo ir tu mano, volarás y te romperás nuevamente, tengo miedo de eso – comencé a sincerarme – ¿Tú detendrías el tiempo? Tengo miedo de que este momento se acabe – murmuré dejando al desnudo todas mis emociones e inseguridades – como si nada hubiera pasado, tengo miedo de perderte de nuevo, Chaeyoung – bajé la mirada y ella con su mano libre acarició mi mejilla.

Cerré los ojos ante su toque, era suave y me trasmitía una paz indescriptible.

Mariposa, ella es como una mariposa.

Desde tercer grado la observaba desde lejos, robándole miradas en silencio deseando ser yo quien esté a su lado cuidándola.

Ahora me encargaré de serlo.

CHAEYOUNG POV:

Acariciaba su mejilla mientras la observaba detenidamente, su belleza debería ser ilegal.

A pesar de todo el daño que me causó, Mina me ha demostrado con acciones que está arrepentida y se ha esforzado tanto en recuperar mi confianza, admiro su fuerza para no rendirse.

Ella ha resultado ser el brillo en mi oscuridad.

Como un Efecto Mariposa, con sólo una respiración de su parte crea un huracán en mi cabeza. Su luz me toca y olvido la realidad. Siento un seco sonido que viene de mi corazón y noto que está latiendo como loco, ella produce eso con sólo su existencia, no puedo descifrar si es un sueño o la vida real.

Pero aunque sea cualquiera de los casos, quiero quedarme aquí para siempre.

– Mi corazón todavía está destrozado por ti y los pedazos se derriten tristemente – dije y ella abrió los ojos – pero tú has logrado reconstruirlo de a poco y te lo agradezco tanto – sonreí y sus ojitos brillaron – sólo quería desaparecer mi amor para siempre – admití y un destello de culpabilidad traspasó su mirada – pero ahora es todo libre para ti, bebé – dije con total y completa honestidad.

Su sonrisa gomosa apareció causando un mar de sensaciones, un tsunami de felicidad arrasó por la poca cordura que me quedaba.

Ella es increíble

– ¿Sabes cuánto te amo? – preguntó y mi corazón se volvió loco nuevamente.

Esta chica hará que me muera.

– ¿Cuánto me amas? – pregunté tímidamente.

– No hay manera de contar mis sentimientos con números – respondió y sonreí, aquí vamos con sus cursilerías que derriten todo mi ser – tal vez en algún momento podré llegar al final de ellos pero mi corazón crecerá un poco más cuando suceda – su voz era tranquila y suave, por un momento me perdí en el movimiento de sus labios.

Basta, Chaeyoung, es un momento romántico.

– ¿En serio no hay siquiera una cifra que se aproxime? – pregunté y ella negó con la cabeza.

– Con todos los números del mundo no podría explicarlo, no puedo mencionarlo – se encogió de hombros – pero me gustaría que lo supieras, desde tercer grado mi corazón no ha dejado de pensar en ti – confesó y exploté.

¡LLAMEN A UNA AMBULANCIA PORQUE UNA WEONA ESTÁ TENIENDO UN COMA DIABÉTICO!

– Bueno, en ningún lugar podrás encontrar a alguien como yo – bromeé haciendo un gesto de diva y ella giró los ojos divertida.

– Nada de lo que haga puede expresar todo lo que siento contigo – murmuró y me abrazó escondiendo su rostro en mi cuello.

Alguien acaba de avergonzarse.

– ¿Sabes lo mucho que he pensado en ti? – pregunté y ella negó aún en mi cuello – yo tampoco puedo expresar todo lo que siento con palabras, incluso si lo digo con todas las que sé, mi corazón sería más encantador – sentí su risa y me estremecí – Mina, no hay palabras en el mundo que puedan expresar lo que siento por ti – murmuré acariciando su cabello – en ningún lugar podré encontrar a alguien como tú – admití y ella salió de mi cuello para mirarme.

– Somos almas gemelas – sonrió – de alguna manera quisiera mostrarte todo mi corazón – susurró sonrojada – ¿qué puedo hacer? – hizo un puchero y mi mente dejó de funcionar.

– Sé mi novia.

Continuará...