SUNSET - ATARDECER / Aristemo (TERMINADA)

XII

Me acomodé en el piso justo en medio de todos, recargando mi espalda en la basé del sofá acompañado de muchas almohadas, a mi lado se quedó Ana y al lado de ella Guadalupe, del otro lado tenía a Pepe y Axel, en mis piernas se acomodaron mis calcomanías y Sebastián, todos quedaron a mi alrededor acomodándose en parte sobre mi mientras veíamos una película y comíamos palomitas.

No sé en qué momento me quedé dormido pero cuando abrí los ojos pude ver a mi Papancho junto a Susana obsérvanos con una sonrisa mientras veía que todos mis hermanos se habían dormido a mi alrededor, a nuestros padres les conmovió tanto que nos tomaron una foto, y ahora está adornaba el estante superior de nuestra sala.

Sonreí mientras recordaba esa foto, mis hermanos eran los mejor que tenía de la vida. En ocasiones cuando estaba internado por pequeñas crisis propias de la enfermedad, como defensas bajas o incremento de fiebre ellos no se iban hasta que mejoraba, muchas veces me pidieron mudarme a casa de Papancho para que estuvieran al pendiente de mí, pero mi novio y yo preferíamos nuestro espacio.

Diego y Mateo también nos apoyaron a su manera, el primero al ser mi mejor amigo nunca dejaba que bajara los ánimos, siempre tenía planes para sentirme mejor y si no podía visitarme liberaba una hora o dos a mi Ari para que estuviera ese rato conmigo. Mateo me ayudaba en otro aspecto, se había hecho cargo de las organizaciones y siempre me mantenía informado, no me dejaba quedarme hasta tarde e incluso adelantaba trabajo para que ambos pudiéramos tener más tiempo libre con nuestras parejas lo cual le agradecía enormemente

El cáncer me había acercado a las personas que amaba pero sobre todo me había enseñado a disfrutar los momentos que son cotidianos e irrelevantes, ahora se volvían muy preciados. Desdé que Ari y yo habíamos retomado nuestra intimidad, nos habíamos vuelto más unidos, ahora mi mente grababa cada saludo, cada beso, cada momento que vivíamos juntos pero sobre todo cada caricia que nos dábamos siempre que nos amábamos.

Cuando las crisis emocionales pasaron, casi todo siguió su curso incluso Ari comenzó a retomar sus giras en el interior de la república de manera que pudiera regresar rápido si algo ocurría, siempre le había costado marcharse de mi lado, pero ahora era casi imposible, sin embargo necesitábamos el dinero, se me hacía injusto que él me ayudara a pagar mis sesiones las cuales eran asquerosamente costosas, había veces en las que mi papancho nos ayudaba y nos decía que era lo mínimo que podía hacer para ayudarnos, me sentía realmente afortunado de poder pagar mi tratamiento sintiéndome mal por todas las personas que no tenían la economía para hacerlo teniendo que morir.

Cuando mi Tahi se iba yo solía quedarme en casa de mi padre, ya que no podía estar siempre solo. En ocasiones ocurrían situaciones poco agradables, como altas fiebres que no bajaban con medicamento y tenían que llevarme de prisa al hospital y quedarme en observación hasta que me sintiera mejor, o se me bajaban en exceso las defensas pero definitivamente las peores crisis eran las de efectos secundarios de la quimioterapia.

FLASHBACK

Era de noche cuando Tahi y yo terminamos de cenar, había tenido quimioterapia ese día por lo que me sentía agotado, solo quería meterme en las sabanas y dormir tranquilamente un par de horas. En cuanto terminamos de colocarnos nuestras pijamas nos dimos besos de buenas noches y nos rendimos ante en cansancio.

Tenía un sueño tranquilo, cuando de pronto sentí un malestar en el estomagó, era como si algo me golpeara con fuerza provocándome nauseas, me desperté de golpe levantándome para dirigirme al baño, en ese instante un mareo se apoderó de mí, me sostuve fuerte de la cama cerrando mis ojos mientras las náuseas me ganaban, vomité en el piso ensuciando mi ropa y parte de la ropa de cama, cuando terminé quise levantarme al baño para poder seguir vomitando y luego limpiar mi suciedad, pero cuanto puse un pie en el piso, otro mareo me atrapo cayendo con un golpe seco en el sucio piso ,eso fue suficiente para que Ari se despertara y encendiera las luces.