Las memorias de Allison (pt. 1)

258 18 1
                                    

Flashback // diario de Allison

Querido diario...

Hoy me han diagnosticado cáncer. Dicen que sin tratamiento alguno, me quedará un año de vida aproximadamente.
Bueno, el médico me dijo que me tratará un tal Wilson... Y después de investigar un poco, parece que es uno de los mejores oncólogos del país.
Ahora estoy buscando la lista de personal del Princeton-Plaisboro; dicen que tiene uno de los mejores equipos de diagnóstico del país, y su jefe ¡es conocido mundialmente!
Um... Creo que se llama House, o eso pone Wikipedia.

Tengo miedo. ¿Y si no tengo cáncer? ¿Y si tengo algo peor? Ya no sé que pensar, ni que sentir; siento que me han dejado apartada del mundo, y que mis últimos mese los voy a pasar en una cama comiendo puré. Y yo no nací para eso. Pero ya solo me queda recordar mis días de gloria, como cuando saque un 10 en matemáticas ¡oh! Y ese 9 en lengua...
Me duele que vaya a acabar así. No quiero. Que horror.

Narra Allison:

No pude seguir escribiendo. Rompí a llorar y me dejé caer de cuclillas sobre mi cama.
Entonces, recordé esa vez que perdimos un partido de fútbol, y todo por mi culpa. Al partido siguiente, el equipo anteriormente ganador, fue ganado. Ese momento, para mí, fue la prueba de que el destino existe.
Al recordar eso, ese gran momento de euforia, me animé a seguir, como mi madre decía.
Respiré profundamente varias veces hasta que me volví a incorporar.
—Si yo me voy a la mierda, se van conmigo —sonreí mirando a la ventana, donde se hallaba una resplandeciente y blanca Luna.
Después de encontrarme algo más calmada, abrí mi cuaderno y seguí escribiendo:

Olvidemos lo anterior. Ahora estoy mejor, porque, total todos vamos a morir, tarde o temprano. Así que ¿gracias vida?
Bueno, así concluye esta anotación, una entre muchas más escritas por una chica con cáncer.

Narra Allison

Vamos allá. Oh sí. Vamos a vivir la vida como Dios manda.

En el presente (narra Allison)

Bueno, esa es mi historia —al abrir los ojos me vi rodeada de House, Wilson, Cameron y otro médico más con una nariz anormalmente grande.
—Es conmovedora —musitó Cameron
—Ya lo digo —añadieron House y Wilson al unísono.
Sonreí e hice una reverencia exagerada:
—Vaya, gracias.

—¡House! ¡Te has comido tres horas de consulta! —la voz inconfundible de Cuddy se oía desde el fondo del pasillo.
El sonido de los aparatosos tacones se fue intensificando más hasta que Cuddy estaba al lado de House con una mueca enojada dibujada en el rostro.
—Has roto con Lucas —House interrumpió a la decana con otra de sus frases directas.

Ella se quedó con la boca abierta, intentando poner excusas. Él esperó respuesta, e incluso un beso o algo por el estilo, pero en vez de eso recibió una carpeta llena de historias clínicas y una respuesta con sorna de Cuddy:
—Si sigues así el que va a romper eres tú, tú y el contrato.
—Cu... —susurró Wilson
Pero ella ya se alejaba a buen paso. Menudo desastre.
—House —dijo el médico de enorme nariz—, si de verdad la quieres, no habrías hecho eso.
Wilson se llevó el dedo a la boca intentando decirle al médico, un tal "Taub" según su bata, que parase, ya que no hacía ningún bien.
House fulminó con la mirada a Taub. Tengo la sensación de que algo malo, muy malo va a pasar.

Narrador:

A continuación un bastón fue volando hasta la cara de Taub, y éste cayó inconsciente; por suerte, Cameron, ayudada por Wilson consiguió agarrarlo y ponerlo suavemente en el suelo.
—¿Estás loco House? —exclamó Cameron, indignada.
—Estoy esperando.
—¿A qué? —inquirió Allison—, ¿a que el todo el mundo te adore a pesar de tratarlos como perros?
El nefrólogo dio media vuelta y añadió:
—Puede. Solo quiero ser feliz.
Luego, se fue cojeando, dando una sensación sombría a la habitación.
Wilson suspiró. Cameron se recostó en él mirando a un aturdido Taub que empezaba a abrir los ojos.
Allison miraba el panorama sin entender muy bien lo que pasaba. Se cruzó de brazos y negó con la cabeza.
—Allison —una voz interrumpió los pensamientos de la chica—, no hagas caso a House.
Ante la inminente recomendación de Cameron, Allison reaccionó de una manera, digamos, peculiar:
—Si no me hubieran hecho caso, estaría muerta. Eso no es una excusa.

Hubo un silencio incómodo. Cuatro ojos miraban a un rostro desconcertado. Nadie decidió romper el hielo; esta vez, lo hizo una enfermera:
—Doctor y Wilson y Doctora Cameron —informó—, les necesitan en urgencias.
Ellos asintieron como si su vida dependiera de ello, y siguieron a la enfermera.
Taub seguía en el suelo, recuperándose del golpe. Allison se asomó desde su cama para poder verle.
—House es un drogadicto y un cínico.
—Puede, puede ser, Taub, pero siempre hay un pero.
—Eres inteligente, niña.
—Tú aún no has visto nada.
El cirujano plástico simplemente sonrió al no entender claramente lo que quería insinuar la frase.
Allison disimuló su latente risa por el comportamiento de Taub.
—Eres gracioso
—Me lo dicen mucho.
—No mientas.
—Vale.

Y así pasaron las horas.



You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Dec 23, 2019 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Cáncer. (Pausada)Where stories live. Discover now