017⇛¿date?

8.9K 710 247
                                    

CAPÍTULO DIECISIETE

CAPÍTULO DIECISIETE

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.

I have a date.





Finalmente, había llegado el día donde saldría del hospital. Estaba completamente nueva y feliz, ya casi no tenía ninguna herida y lo mejor de todo; tenía un estómago lleno y feliz.
Hace unos días, mi madre Elsa junto con Asdrit habían venido a visitarme. La tía Anna con Kristoff aún no llegaban ya que la nevada en Arendelle había empeorado estos días así que se había complicado todo.
También Olaf había venido, ¡estaba completamente feliz! Y queda más feliz cuando vio a Alena, cuando se vieron, jure ver como se formaron unos corazones en el los ojos de Olaf, pero Alena, dura y desinteresada simplemente lo había ignorado.

Me pare de mi cama después de haberme aborachado las botas que llevaba, estaba nerviosa, lo admitía, no había visto noticias de Auradon y mucho menos sabía como la gente iba a recibirme.
Pero tenía que ser fuerte, este era un nuevo comienzo para mi y tenía que disfrutarlo.
La duda que seguía carcomiendome en mi cabeza era ¿quién se había hecho pasar por mi?
Evie me había explicado que la investigaciones no habían parado desde que se demostró mi inocencia, sin embargo, no descubrieron quien robo mi identidad. Pero eso lo dejaría para después.

"Estamos esperando afuera" fue el mensaje que Ben me envió.
Camine hasta la puerta y la abrí y comencé a caminar por los pasillos. El personal del hospital me saludaba y por supuesto, yo les devolvía el saludo.

Otro asunto que quería arreglar en cuanto llegara a la preparatoria Auradon, era hablar con Diego y agradecerle.
El había sido el que me había encontrado en el bosque, no había tenido la oportunidad de darles las gracias por que lamentablemente el no había venido a verme, Jay me explico que fue por que los profesores le habían dado un montón de trabajos.

Sali del hospital y cuando levante la mirada para buscar el auto de Ben, me quedé pasmada por lo que vi.

La gente de Auradon estaba ahí, parada, viéndome con una sonrisa y en sus manos tenían globos, observe a Mal y Evie y ellas rieron con picardia, allí supe que todo esto fue idea de ellas.
La gente cuando me vio, soltó un "bienvenida" y lo único que hice fue sonreír.
La gente se comenzó a acercar hacia mí y me dio abrazos, algunas personas susurraban en mi odio "disculpa" "siempre creímos que fuiste inocente" "lo lamento" y cosas así.
Sonreí por todo lo que estaba pasando, por fin, iba a ser mi momento.

Después de un día agitado, llegué a la preparatoria de Auradon

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.


Después de un día agitado, llegué a la preparatoria de Auradon. En mis manos tenía un montón de regalos que las personas me habían dado, apostaba que la mayoría eran vestidos, perfumes, diamantes... Lo típico para una princesa como yo.

—Gracias chicas, eso estuvo genial —Tome las manos de Evie y Mal y les di una caricia.

—Por nada, te lo merecías —Evie me sonrió.

Baje del auto y agite mi mano diciendo un "adiós" y entre.
Los adolescentes de la preparatoria me saludaban y sentí que por un momento, no había pasado nada y seguían siendo las cosas como habían sido, pero no lo era.
Había pasado todo y era algo que no podía olvidar pero si podía perdonar.

Llegué a mi habitación y dejé los regalos ahi y posteriormente comencé a salir para irme hacia la habitación de Diego.
Camine unos minutos mientras pensaba en que podía regalarle en forma de agradecimiento. ¿Un reloj talvez?
Cuando llegue a su habitación, antes de que pueda tocar la puerta, por ella salió una chica de cabello rojo, bastante pálida a mi parecer, pero igual la mire con amabilidad.

—Hola, ¿esta Diego? —Pregunté. La chica me miró con desagrado y asintió con la cabeza.

No me dijo ni pío por qué se fue dando zancadas, alce mis cejas y decidí ignorarla.

—¿Como esta el Hercules de mi historia? —Canturre entrando a su habitación.

Diego estaba sentado en su cama con una laptop en sus piernas, cuando me vio entrar, sonrió.

—¿Hercules? —Cuestionó mi apodo.

—Si, ya sabes, Hercules es un héroe y dado que tu me salvaste, ese apodo es digno para ti —Dije soltando pequeñas risitas.

—Viéndolo así, me gusta —Diego rio junto conmigo.

—Por cierto, ¿quién era la chica que salió? —Pregunté curiosa.

—Oh, es hija de una de las empleadas de la princesa Tiana. Es muy buena en matemáticas, viene ayudarme de vez en cuando. Se llama Jade —Diego se levantó de la cama.

—Oh, si creo que la recuerdo. Solía jugar con ella y con María cuando había bailes —Conteste pensativa —No recuerdo por qué dejamos de hacerlo, sinceramente. La note cambiada.

—Bueno, entonces solo viniste aquí para hablar o...? —Cuestiono.

—Quería agradecerte, ya sabes —Levante mis hombros. —Pero aún no decido que darte.


Diego pensó durante unos momentos. —Que tal, ¿una cita?

—¿Una cita? —Pensé unos momentos. Una cita de amigos no tenía nada de malo, ¿cierto? —Está bien.


—Mañana te recojo, en tu habitación. A las 6 —Asentí con la cabeza y le sonríe.

—Tengo cosas que hacer, nos vemos mañana —Me acerque a Diego y le di un pequeño abrazo. Después me encamine hasta la puerta y salí por ella.

Tenía una cita.

Y no era con Harry.

The Princess > Harry Hook | Descendientes Onde histórias criam vida. Descubra agora