El trato y el sacrificio

Capítulo 18 "Intercambio"

- Espérenme afuera - ordenó la pelinegra.

- Gracias - dijo Rachel animada.

- Sólo una cosa más - explicó y ella la escuchó atenta - Si él llega a estar muerto. Las mascaras y esa maldita katana son mías.

- Él no lo estará - refutó Rachel.

- Que ingenuo optimismo - bufo Teresa - Te falta mundo.

Rachel la miró desafiante por un momento. Aunque odiaba ser subestimada estaba dispuesta a aguantar cualquier insulto con tal de salvar la vida de Derek.

- Y a ti conocerme - espetó y se retiró de la habitación.

Teresa sonrió relamiéndose el labio inferior. A eso llamaba ella: "Tener valor y en su defecto demaciado optimismo".

*********🎭*******

Cuando Rachel entró en la aun oscura habitación. La inmóvil imagen de Derek en el suelo rodeado de un espeso charco de sangre la hizo vibrar.

- ¡Derek! - exclamó llevándose las manos a la boca con los ojos llenos de lágrimas.

- Aún respira - explicó Teresa con voz seria tocándole el vientre y notando como este aún se elevaba - Tienes mucha suerte eh idiota - murmuró y se enderezó en el suelo mientras sus manos lentamente tocaban el lugar de la herida aún cubierta por la camisa rasgada y bañada en sangre. La cortada no era muy profunda, pero había provocado que él perdiera mucha sangre. Teresa por su parte no perdió el tiempo. Ya se habia mojado las manos con alcohol cuando miró a Rachel y trono los dedos frente a su cara pidiendo su atención - ¡Ey!, ¡Ey¡, No es momento para llorar. Necesito que me ayudes aquí - advirtió.

- ¿Qué necesitas? - preguntó volviendo su atención a Teresa.

- Suturar la herida me llevará tiempo. Tengo lo necesario en mi mochila, pero luego tu lo vas a cuidar y lo desinfectaras, necesitarás gasa y agua con oxigenación. Antibióticos de más de 500g. Son unos comprimidos blancos en una caja escrita con letras rojas "amoxicilina o ácido clavulánico" 125 mg; ese es más fuerte - Teresa se detuvo, tocó a Derek en su rostro, pero este no reaccionaba - Si no despierta talvez necesites Cefazolina o en caso de una alergia Doxiciclina más Clindamicina -agrego tocándose la sien - También voy a necesitar algodón, cinta y más alcohol. Todo lo que puedas conseguir lo traerás. ¿Puedes hacerlo?.

Rachel trato de memorizar todo en su mente sin olvidar ningún detalle y cuándo la pregunta se emitió ella asintió sin saber si en verdad podría.

- Se donde conseguirlo - explicó.

- Entonces ve con Conner - ordenó apuntando al pelirrojo en la puerta de entrada, pero Rachel dudo - Yo me encargaré. Vete - le ordenó, pero Rachel aun no se movió - Sabes... A diferencia de muchos aquí yo si cumplo mi palabra - explicó entonces la pelinegra - ¿Tu cumplirás la tuya? - desafío.

- Solo salvalo - pidió Rachel con los ojos iluminados.

- Entonces muevete - ordenó una vez más. A Teresa le sentaba bien dar órdenes. Tenía una clara imagen de autoridad.

Rachel sospecho que de seguro ella fuera del juego era el tipo de doctora que ocupaba algún cargo de poder y no se equivocaba.