𝟬𝟰𝟱 how to kill a narcissist?

Start from the beginning
                                    

      Nina suspiró. Entonces, le contó todo. Bueno, excepto por el discurso de Chuck de que "lo había hecho por ella". Sabía que no los llevaría a ningún lado. Por el contrario, solo ocasionaría problemas. Además, claramente era otro intento del chico por manipularla. Sin embargo, eso ya no iba a pasar más.

      —Eso está tan... jodido—, murmuró Remmie, aún sorprendido ante la nueva información.

      La chica asintió, agradeciendo tener un café entre sus manos porque realmente lo necesitaba al tener que hablar de Chuck tan temprano en la mañana. Desvió su mirada a su reloj de mesa, y no se sorprendió al descubrir que eran las once de la mañana. Entre que había terminado con sus exámenes y con todo lo que había pasado, se había dado la recompensa de dormir sin poner la alarma.

      —Lo sé—, masculló Nina, posando la taza de café, ahora vacía, en la mesa al lado de su cama —. Todavía no sé qué me sorprende más. Que haya sido capaz de hacer eso, o que me haya tenido engañada por tantos años.

      Remmie apretó sus manos entre las suyas —. No es tu culpa, bebé.

      —Lo sé—, balbuceó la morena. Aunque en el fondo seguía sintiéndose culpable en parte por el sufrimiento que había pasado su amiga. Si ella no hubiera estado tan ciega, hubiera podido advertirle, hubiera podido protegerla —. Pero voy a vengarme.

      Los ojos azules se tornaron cautelosos, y sus cejas se juntaron al observar a la chica frente a él —. Nina...

      — ¿Cómo matas a un narcisista?—, musitó, una pequeña sonrisa jugando en sus labios. Cuando la única respuesta que obtuvo fue un ceño fruncido, continuó —. No muestras ninguna emoción, solo le das respuestas cortas y necesarias. Interacción mínima, y cero contacto. ¿Lo más importante de todo? No reaccionar a sus provocaciones.

      Remmie lució complacido con aquella respuesta. No había duda que prefería que la chica se alejara de aquella persona que le había infligido tanto daño, pero sería tonto el asumir que podría hacerlo. Ellos eran parte de la socialité neoyorquina. Se verían las caras en cada evento, y más de una vez probablemente se verían forzados a entablar una conversación. No obstante, saber que Nina se proponía mantener una interacción mínima con él lo tranquilizaba.

      — ¿Cuándo tendrás que verlo, de todas formas?—, cuestionó el actor.

      Nina torció el gesto —. Serena me invitó a la Gala de Médicos Sin Fronteras en Columbia porque quiere que conozca a su padre. Chuck seguramente va a estar también... ¿por qué no vienes?

      Remmie alzó las cejas —. ¿Segura?

      — ¡Por supuesto!—, asintió, una repentina sonrisa alzó sus labios al mismo tiempo que quitaba las sábanas de sobre sus piernas y se levantaba —. ¡Vamos! Debo comprarme un vestido, y te compraré un traje que combine. Será divertido.

      El chico rió —. ¿Comprar ropa puede ser divertido?

      Nina soltó un jadeo, mirándolo con falsa indignación ante sus palabras —. ¡Obviamente! ¡Dices eso porque no fuiste a comprar conmigo!—, acusó, quitándose la remera que usaba para dormir por sobre su cabeza y colocándose un brasier antes de pasear su mirada por su armario, en busca de un buen atuendo —. ¿Cómo lograste entrar aquí sin que todo el mundo perdiera la cabeza, por cierto?

      —La magia de la fedora—, exclamó, alzando el gorro negro que descansaba sobre la cama de la chica y que ella no había notado hasta ese momento. Ante la mirada que le envió su novia, Remmie se vio obligado a agregar —. Y mantuve mi cabeza abajo mientras caminaba rápido por los pasillos.

SHADOWS: gossip girl.Where stories live. Discover now