Capitulo 172

330 13 1
                                    

Narra Malú

- Vamos a tu casa.

Propongo.

- Podemos estar un rato más solos y luego a por las chicas.

Sergio y Erika saben que no iremos a por ellas y se ocuparán de todo. Mi suegra se ha llevado ayer una bolsa con todo lo necesario para las más pequeñas y Alba volverá a dormir con sus abuelos después de salir con su chico.

+ Muy sacada estas tu este fin de semana.

Río, es verdad, estoy cachonda, pero me lo llevo a su casa para celebrarle con sus amigos, no para follar.

- No me vaciles.

Es inevitable que se me suban los colores cuando me habla así.

- Es culpa de mi chico, que está muy bueno.

+ No te excuses cariño, no se me ocurre un mejor plan.

Sonríe malicioso.

Narra Gaby

Entramos a casa y el corazón casi se me sale del pecho cuando al darle al interruptor escucho el grito unánime de unas 50 personas exclamando un "Feliz Cumpleaños".

+ Capulla, muy guardado te lo tenías.

Susurro dulcemente en su oído al abrazarla, la primera, no me cabe duda que ha sido idea suya.

- Feliz cumpleaños, mi amor.

Responde con una sonora sonrisa.

Me dispongo a saludar a cada uno de los invitados de la fiesta que han montado, agradezco a mis hermanos, les conozco demasiado como para dudar que han sido los cómplices de mi chica y pregunto si hay alguien más a quien deba agradecer, pero parece ser que entre los tres se han apañado para hacerlo todo.

- Cuidado.

Se parte de risa cuando ve que es demasiado tarde. He entrado en la cocina a por más picoteo y mi pie ha ido a dar justo sobre el pis de la nueva cachorra, haciéndome resbalar y caer de culo.

- Que he venido a por más patatas.

Limpia las lágrimas que se le escapan por la risa.

- Y me he encontrado a esta cosita algo descontrolada.

+ Y te apiadas de la perra que se mea y no de tu chico lastimado.

Se queja.

- Pobrecito mi chico, que se ha hecho daño en el culo.

Se acerca a mi, haciéndome carantoñas como si fuese un enano.

- ¿Tienes pupa?

Asiento dejándome mimar, se sienta sobre mis piernas y con un mal movimiento acabo por apoyar mi mano en el charco que ha dejado la perra.

+ Que asco joder.

Explota en una carcajada.

+ Que no te rías coño, te estampo el pis en toda la cara.

La amenazó risueño levantando mi mano húmeda. Nada me gusta más que oírla reír. Se quita rápidamente y me levanto para lavarme.

Me abraza desde atrás apoyando su cara en mi espalda, se parte de risa la cabrona.

- No te enfades.

Me pide sin poder esconder su felicidad.

- Vete a cambiar, yo acabo con todo esto.

Se ofrece, hay que limpiar el suelo y llevar el picoteo que ambos hemos venido a buscar. Mi pantalón también tiene algo de pis, necesito quitármelo.

+ Gracias.

Le doy un pico.

+ Y a ti tendremos que enseñarte, ¿eh?

Digo mirando a la perra que mueve el rabo como si entendiera lo que ha pasado y le hiciera la misma gracia que a mi novia.

Al bajar con ropa limpia me encuentro la cocina impecable, y a ella en el salón pasándosela pipa, parece un adolescente de fiesta con mis amigos. A la mayoría ya les conoce y por suerte han encajado de maravilla, sostiene una copa en su mano izquierda y baila con Rubén disfrutando de la noche.

Solo el amor nos salvará Where stories live. Discover now