Mía - Gaara Y Tu Lemon -One Shot

Capítulo 2

Una vez terminaron la joven, quedó acostada en el pecho de su esposo mientras sonrreía tiernamente.

-No deverias hacerlo.

Ella se confundío con lo que el había mencionado. ¿A que sé referia?.

- ¿A de que hablas?.

Acaricío suavemente la espalda de su hombre, podía sentir su aroma. Tan rico.

- No deberias portarte mal.

Paró en seco y se separo un poco de el para mirarlo directamente a la cara, arqueado una ceja.

- Mmm, sabes,me entere.

Ella asintío.

- Que tú.

Ante esto, ella se señalo a si misma en forma de pregunta.

-Asi es, tú.

Rodeo su cintura con sus brazos, hizo que lo mirara. Nuevamente cara a cara.

El se acomodó mejor en su asiento, a la par haciendo que la chica se sobresalte, su miembro seguía dentro de su mujer.

-Ash~ ah.

Lo miró algo enfada.

-No me mires así, eres una chica muy mala y desovediente.

Beso salvajemente sus labios mientras tocaba su trasero, aparte de la espalda de su linda esposa.

- mmmn~ ..

Podía sentir como el miembro de su esposo se hacía más y más grande dentro suyo.

- Mmm~ quiero hacerte mía, otra vez.

Atacó su cuello besandolo y besando mordidas al igual que chupetones.

En un determinado momento subío hasta su oído susurrandole mientras mordisqueba este.

- Quiero un hijo mío, dentro de tú lindo vientre.

Acaricío su cabello.

El sé levanto con ella enrrollada de piernas en su cintura, sus brazos al rededor de su cuello, aferrándose a él como si su vida dependiera de ello. Esté la depósito en la cama suavemente para luego prácticamente tirarse ensima suyo claro, sin lastimarla.

Ella se sintió nerviosa de repente, se había dejado llevar por el momento, aún no le había dicho a su esposo sobre su embarazo, el estaba besando el cuello de ella mientras subía, se estaba dirigiendo nuevamente hacia sus oídos.

- Dime. ¿Que te pasa?-preguntó el haciendo que ella se sacara de sus pensamientos.

- Nada solo...

Estaba demasiado nerviosa, el ya le había dicho que quería un bebé, solo que ella tenía miedo de que llegue demaciada apresurada la noticía del embarazo. Tan sumida en sus propios pensamientos que no se dio cuenta de la idea tan errónea que el pelirrojo se estaba creando.

- ¿No quieres bebes?.

El paró en secó para luego mirarla bastante serio.

- ¿Q-que dices?...

- Pensé q te gustaría la idea.

El se levantó, su mirada ahora era fría.

- No...no es eso.

Dijó cubriendose con una manta.

- ¿Entonces que?. No quieres un bebe. ¿Cierto?. Ajá, claro. Sería una maldita perdida de tiempo.

El estaba empezando a alzar el tono de voz, se escuchaba molesto. Ahora ya estaba empezando a intimidar la.

- Y-ya te dije que no es eso,es qu-..

- ¿QUE? ¿NO QUIERES TENER AL HIJO DE UN ESTUPIDO EN TU VIENTRE, ES ESO MIERDA?

Estaba furioso, tambien la chica se estaba enojando, ya que no la habia dejado terminar.

-¡YO NUNCA DIJE ESO!. QUE NO QUERIA UN BEBÉ , TAMPOCO TE DIJÉ QUE NO ME GUSTARÁ LA IDEA.

Ultimanente ella se alteraba por cualquier cosa, claro, síntomas normales del embarazo.

- TAMPOCO DIJE QUE NO QUERIA UN HIJO DE UN ESTUPIDO. ¡POR QUE MALDITA SEA, NO LO ERES!. ADEMAS, YA TENGO A UN HIJO NUESTRO EN MI INTERIOR. ¡¿COMPRENDES?!.

Sus lágrimas de furia y tristeza salieron rápidamente derramando se si consuelo por sus mejillas.

-¡ESCUCHASTE!. ¡ESTOY EMBARAZADA!.

Se sentía indefensa de alguna u otra manera. El chico simplemente estaba en shock. Idiota.

-Yo...esto, no me había dado cuenta.

Miraba a la chica, tratando de reaccionar de alguna forma, se sentía confuso. Por suerte este reacciono cuando vío a su esposa levandoce de la cama, caminando hacia la puerta con la manta que tenía, quería salir de ahí cuanto antes. El la tomó del brazo de teniéndola, no dejaría que de fuera.

La atrajo hacia su cuerpo abrazando la, no quería que se fuera.
- L-lo lamento..pero te amo mi amor, yo no sabia, te amo mucho, mucho, enserio amor.

Se sentía culpable

-No debí gritarte, discúlpame. Te amo, discúlpame.

Su voz era bastante quebradiza.

-No sabía que estabas embarazada amor.. perdóname...perdoname..

Era un imbecil.

-No llores amor. No llores, mi dulce esposa, te amo.

Totalmente arrependito la alzó estilo nupcial llevándola nuevamente a la cama. Sentía que ella esta temblando.

- Perdón.. perdón mi amor.. no llores.. tranquila.

Se acostó al lado de ella abranzandola fuerte. No la dejaría sola otra vez. Una lágrima traicionera recorío su mejilla derecha.

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¡HOLIS!
ojalá les haya gustado, acabo de reescribirlo, cosa que hacía bastante falta. Me ayudaría muchísimo si me indicaran mis errores, no olviden de comentar. ¡¡Los amo!!.♡