—S-soy Liam señor—Dijo tartamudeando.

—Bien niño brócoli, dejemos en claro algo. Ella tiene cuatro años y aún es pequeña para tener novio así que a menos que hables con ella a mas de tres metros de distancia, dejaré que sean amigos. Pero si cruzas un centímetro menos—Dijo acercándome a él.—Un centímetro menos de esos tres metros, estos de aquí—Toque con mis dedos la punta de uno de sus rizos.—Serán rapados—Dije sonriendo para soltarlo.—¿Entendido?

—E-entendido s-señor—Tartamudeó mirándome asustado.

—¡Si entendiste bien!

—¡Si s-señor!

—Puedes irte mocoso—Dije sonriendo.

Pero aquella sonrisa se desvaneció al girarme y encontrarme a una pequeña niña de brazos cruzados y ceño fruncido mirándome.

Joder, tiene la cara de Jimin cuando no le ayudo en los deberes.

Princesa...

Minhye se giró y se dirigió molesta hacia el auto intentando subir. Me acerqué suspirando para ayudarla pero, era hija de Jimin. Tenía que serlo.

—¡No me toques! ¡Yo puedo!—Chilló saltando.

—Minhye, no llegas al asiento dejam-...

—¡No! ¡Suéltame, suéltame!—Se removió.

—¡Ya! Te dejas de mover y te subiré al auto quieras o no—Dije firmemente para levantarla como pude recibiendo un manotazo en la cara de casualidad.

O eso quiero creer.

Una vez sentada le abroche el cinturón mientras se encontraba refunfuñando en su asiento. Le di un beso en la frente y rodeé el auto para irnos.

.Ahora.

Y eso es todo.

El joven rubio me miró para echarse a reír.

—Lo siento es que, tiene cuatro años apenas ¿Si sabes que ni siquiera deben saber lo que es ser novios no?—Preguntó divertido.

Sentí mis mejillas calientes.

—¿Crees que me pasé?—Pregunté mirando hacia Minhye que estaba jugando en la casita de muñecas mientras MinJae con cara aburrida jugaba con su hermana.

Si el lugar se llamaba "Little princess" era por algo ¿No?

—Creo que es normal que un padre sea celoso, son tus hijos no quieres que les hagan daño, pero en mi opinión debes de preocuparte por eso en once años más—Dijo sonriendo suavemente.

Suspiré, el chico tenía razón.

—Lo sé y no quiero ni imaginarme lo que haré cuando aquello suceda.

El rubio rió.

—¿Acaso quieres que tu hija tenga un novio a los 50?

—Oye, no es mala idea—Dije pensando.

Se golpeó la frente.

★ TATTOOED DADDY® KOOKMIN ★Where stories live. Discover now