My beautiful Hybrid • YoonMin • Lemon

•°2°•

El silencio era verdaderamente incomodo, solo se escuchaban nuestras respiraciones, todo bastante incomodo.

Nos mirábamos fijamente, yo me encontraba com mi forma de felino, pues estaba desnudo y no tenía ropa para ponerme.

Estaba muy nervioso, no sabía si me iba a echar o que iba a hacer con su vida.

Lamí mi patita intentando tranquilizarme.

-Haber si entendí, ¿eres un humano gato?- dijo confundido.

Asentí.

-estoy hablando con un gato, ¿estoy soñando?- negué -sabes, iré a traerte ropa, para que... Al menos, pueda hablar con un "humano"- fue hasta una habitación, y llego con un short, una camisa y pantuflas.

Arrastre toda la ropa y me cambie en el baño.

Volví a sentarme en la silla.

-okey, ahora podré tener una converzación "coherente"- dijo al verme ya vestido -¿Que mierda eres?-

-un h-híbrido- dije tímido.

-¿Un que?-

-Un híbrido, una persona que puede transformarse en un animal, en mi caso, un gato- le sonreí.

-lo dices como si fuera lo más normal del mundo, cuando tranquilamente podría echarte de mi casa- lo miré asustado.

-n-no por favor, no tengo casa, vivo en la calle, además, la perrera me persigue- hice un puchero.

El me miro extrañado.

-¿Y tus padres?-

-Fallecieron- dije jugando con mis dedos.

-oh, lo siento- negué sonriendo -supongo que, podre dejarte que vivas aquí- estaba seguro de que mis ojos brillaban -lo malo, es que solo tengo una cama- lo miré confundido.

-puedo dormir en el sofa, si quiere- el negó.

-Sabes, tengo una cama de mi anterior gatito, bueno, murió pero, ¿no te molestaría dormir ahí?- negué feliz.

-Nop-

-perfecto, entonces... haré la cena- dijo levantándose de su asiento.

-No, ¡Yo lo hago!... Es lo menos que puedo hacer por dejarme quedarme aquí- el me sonrío.

Me levante de la silla y camine hasta el horno.

-no me dijiste tu nombre- me preguntó.

-Jimin, Park Jimin, tengo veintiún años- me presente con una reverencia -¿Y usted?-

-Min Yoongi, tengo veinticinco - asentí.

Era muy joven, demasiado para tener una gran casa.
Decidí hacer pasta con salsa, algo suave.
Al terminar de hacerla, puse la mesa y luego lo llamé.

Ya nos cenando.

-Esta delicioso, Jimin- mis mejillas se tornaron rojas.

-G-gracias- le sonreí.

El miro su reloj de mano y frunció sus labios.

-ya deberíamos ir a dormir- asentí -ahora lavare yo, así estamos a mano-

-Esta bien- le volví a sonreír.

Volví a mi forma de gato, el me miró sorprendido.

-P-puedes hacer eso cuando se te cante?- asentí -woah- dijo sorprendido -T-tu cama esta en el living- volví a asentir y camine hasta el lugar indicado.