Pensamientos en blanco y negro

Relato 2

Solo tengo una curiosidad bueno quizás debería enfatizar que es una gran curiosidad o talvez un dilema que solo me pasa a mí.

Desde cuándo el dinero se volvió tan imperativo en la sociedad, desde cuándo las personas antes de socializar con alguien primero examinan su estatus y su billetera para decidir si entablar una amistad o no, ¿En verdad somos tan materialistas y superficiales?.

No sé confundan con lo que escribo estoy muy consciente de que el dinero es tan importante como el oxígeno en esta época pero acaso ¿No deberían primero fijarse en si eres una buena persona, si eres agradable o si tienen cosas en común para decidir si entablar una amistad con una persona?.

He visto tantos casos de relaciones y amistades basadas únicamente en el interés que ya hasta perdí la cuenta, fuí testigo de un caso hace unos meses atrás que de verdad me dejó perplejo, mi vecina Diana se casó con un hombre totalmente violento y déspota con ella, aquel hombre siempre la vivía golpeando y tratando de la peor forma posible, ella siempre trataba de disimular los moretones en su rostro con unas gafas negras muy grandes pero todo el barrio conocía su historia.

Una vez me topé con ella en el supermercado y trate de indagar de forma superficial y amable el tema, ella siempre se hacía la desentendida y cambiaba de conversación para evitar responder algo que la comprometa a ella o al marido.

En ese jueguito de tratar de hablar sobre el tema y ella esquivandome estuvimos cerca de 3 semanas hasta que un día la encontré llorando mirando muy concentrada una manzana de la estantería del supermercado y es ahí donde decido acercarme para hablar sin tapujos, ella a lo que me ve se lanza sobre mi como si pidiera a gritos un abrazo o un gesto de cariño de parte de alguien, yo la verdad me quedé anonadado, sentí tanta ternura y lástima por esa mujer pero esos sentimientos no evitaron que le pregunte: ¿Diana tú no tienes hijos con el ni nada que te ate de por vida, porque simplemente no te vas y te alejas de ese hombre que tarde o temprano te va a matar?, La respuesta que obtuve fué el detonante para que yo escribiera este relato, ella dejo de abrazarme y me dijo con una gran seriedad: Andrés no tengo a donde ir, el tiene mucho dinero y yo vivo muy cómoda y con todos los lujos que cualquier persona quisiera tener, no voy a abandonar esa vida que tengo solo por unos golpes que me da mi esposo cuando lo hago enfadar con mis tonterías.

Después de eso nunca más me la volví a topar en el supermercado ni en ningún lado, su estúpida forma de pensar me hizo replantear muchas cosas y muchos conceptos que erróneamente tenía: ¿De verdad hay que sacrificar la dignidad y tú felicidad simplemente por el dinero y el estatus?
Deberíamos conocer bien a las personas antes de casarnos o entablar una amistad , la mayoría de personas malas y pedantes que conozco tienen mucho dinero, ¿Acaso el dinero y el poder te vuelven mala persona?.

Yo honestamente preferiría una pareja que viva de su sueldo, que viva con las justas de dinero pero que sea una persona buena, amable y que de verdad valga la pena en mi vida.

Escrito por Andrés Lainez