Pero, una de las principales razones por las que había regresado era exactamente para evitar que el causante de la inexistencia de la vida en la ojiazul, ocurriera.

Las luz del sol apenas podía colarse a través de las cortinas, chocando contra su rostro, la calidez de marzo contra ellos.

Pero, había algo diferente, algo se sentía... Extraño.

Con mucho cuidado, se movió para escapar del abrazo que Cherry le ofrecía, maldiciendose al desear seguir ahí el resto del día. Miro su semblante pacífico, delineando desde su mentón, hasta sus rojizos labios entreabiertos, su nariz respingada y ligeramente ruborizada y su ceño apenas fruncido, las perfectas facciones de la Cherry que el recordaba cuando se había ido de la academia.

Esperen, ¿Cuando se había ido de la academia?

Cinco volvió unos pasos, mirándola nuevamente.

—Oh, mierda —maldijo.

EN LA SALA DE ESTAR, sorprendentemente, se encontraban los Hargreeves, a excepción de Pogo y Grace, claro

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EN LA SALA DE ESTAR, sorprendentemente, se encontraban los Hargreeves, a excepción de Pogo y Grace, claro.

—¿Chicos? —pregunto Cinco al verlos, Allison y Vanya le daban la espalda, por lo que al escucharlo giraron a verlo. La mirada de los cinco estaba sobre el.

—Buenos días, Cinco —hablo Allison

—Yo... Buen día —titubeo, sin dejar de pensar en la imagen que había apreciado antes de salir de la habitación —Ahm... Necesito que vean algo.

En menos de que pensaban, estaban fuera de la habitación de Cherry, Cinco dudaba en abrir la puerta, pero al final Klaus se desespero y abrió la puerta de golpe.

—¡No es cierto! —exclamo en un grito, recibiendo la mala mirada del pequeño uniformado.

—¡Shh! —chisto, Klaus rodó los ojos mientras los demás observaban incrédulos la escena.

—¿Ella es una...?

—Niña —Luther interrumpió las palabras de Diego, ganándose una mala mirada del moreno.

Su cuerpo se había encogido notoriamente, era pequeña, muy pequeña, más que Cinco y que Vanya incluso. Su pijama quedaba enorme en su cuerpo, y su rostro, estaba tan pacifico que tan solo verla causaba el suspiro de Cinco.

—¿Cómo pasó? —pregunto Allison confundida, Cinco no evito rodar los ojos, mirándola mal después.

—Claro Allison, porque se perfectamente como funcionan los poderes de Cherry —ironizo, la morena bufó, Cinco apretó el puente de su nariz, suspirando —Desperte y... Ya estaba así.

—¿Durmieron juntos? —pregunto Klaus con picardía, recibiendo las miradas fastidiadas de los otros cuatro —Bueno, igual no es la primera vez que pasa —se encogió de hombros, y la mirada de ellos se volvió confundida

¹ 𝗖𝗢𝗙𝗙𝗘𝗘 | cinco hargreeves (reescribiendo)Where stories live. Discover now