Beneficiados [Kookmin Two-Shot]

II

2 meses después.

—Bien chicos, ya son las vacaciones de semana santa. Como ya presentamos su antepenúltimo parcial, no deben preocuparse por estudiar. Disfruten mucho sus vacaciones y recuerden no conducir ebrios ni abusar de el alcohol. Nos veremos en dos semanas— terminó de decir la maestra Kim y todos gritaron porque ya comenzaban las vacaciones.

Me paré y salí del salón, esperé a que todos salieran y al final (como siempre), salió mi lindo novio, Park Jimin.

Después de unos días de que iniciáramos una relación, todos se enteraron que eramos pareja. Al principio al único que si le decían o preguntaban era a mi, ya que Jimin nunca perdió esa aura desafiante y rebelde que tiene en la escuela.
Pero después dejaron de molestarme, gracias a que el pelinegro los amenazo "¿qué tanto le están preguntando a mi novio?", recuerdo eso y automáticamente sonrío como un idiota.

Aunque siempre sonrío así cuando estoy con el.

Lo tomé de la mano, entrelazando nuestros dedos y caminamos hasta su motocicleta. Ahí estaban esperándolo Jin y Yoongi hyung.

Jimin me los presentó a ambos unos días después de que comenzáramos a salir. Ambos eran muy amables, aunque Yoongi hyung tenía su carácter.

—Hey Jimin, Jeon. En unos días será mi cumpleaños y haré una fiesta. Los espero ahí.— dijo Jin hyung con una sonrisa amable.

—Ahora ya no nos invitas, si no, nos ordenas ir a tu fiesta — comenta Jimin con una sonrisa.

—Hizo lo mismo con Hobi y Nam, no te sorprendas.— informa Yoongi hyung cruzándose de brazos.

—Ahora que mencionas a Hobi hyung, ¿están peleados?, no los he visto juntos.— pregunta Jimin extrañado.

—Sabes que ambos nos damos nuestro espacio. No somos como Jeon y tu, que en cualquier momento nos estamos besando y tomandonos de las manos. O como Jin hyung y Nam que siempre están manoseandose cada que tienen oportunidad.

—¡Oye!— gritó Jin

————

Nos encontrábamos en mi casa, viendo una película, acurrucados en mi cama.

Jimin al llegar a mi casa, lo primero que hace es ponerse una de mis camisas y su pijama. La mayoría de las veces dormía aquí o se la pasaba más tiempo en mi casa, que decidió traerse un poco de su ropa, aunque siempre le gustaba tomar una de mis camisas.

—Jeon...

—Mm...?— mire sus hermosos ojitos avellana.

—Te amo— eso hizo que sonriera, me incline un poco para darle un beso y contestarle lo mismo.

—Yo también te amo.

Sólo me sonrío y volvió a prestarle atención a la película.

Sentí algo duro en mi pierna.

Jimin se separó un poco de mi, avergonzado.

Ya sabia lo que tenía.