One shot MiChaeng (SAD)

Por favor...

Ella si consideró la posibilidad de algún desastre y por un momento muy largo guardo silencio, pensando en los pros y contras de la situación. Pero vamos se veían felices, jamás había visto así a la japonesa, cabe mencionar que ella siempre era reservada, pero realmente se veía feliz y como líder y amiga de las integrantes debía también velar por su felicidad.

.~¿Entonces que dices? Jihyo-Unnie~.
Pregunto esta ves la japonesa, poniéndose un poco más seria.
.~Yo creo que por mi está bien~.Dijo y de inmediato la parejita empezó a sonreír de nuevo.~ Pero mi deber es advertirles y decir que, las peleas de pareja no pueden afectar nuestro trabajo profesional, y lo más importante sean discretas por favor~. Dijo mirándolas seriamente pero aún con la sonrisa en su boca.~ También debo avisar a PDI-nim (JYP) yo hablaré con el, se que lo entenderá~. Dijo y por fin relajó sus facciones.~Yo abogaré por ustedes~. Dice al ver la cara de miedo de la más pequeña.
.~Gracias Unnie, por esto y todo eres la mejor líder~. Dijo la japonesa para dirigirse hacia la puerta y jalando a su chica, a Jihyo le llegó mucho al corazón sus palabras, ya que la japonesa no era de expresar emociones que digamos.

                        {Fin del Flash back}

¿Que había pasado con esa linda pareja que salieron por la puerta de su habitación? Cómo es que todo cambio de un momento a otro, hace una semana, la pequeña estaba buscando con muchas ansias el regalo perfecto para su tercer aniversario, ¿Por que todo cambio? Y se dio cuenta de las palabras de su abuela le repetía una y otra ves.

No todo es para siempre.

Salió de su trance al ver que la pequeña agachó la mirada, esta estaba sentada en la parte de arriba de la litera, recargada en la esquina de la pared, con sus pies encogidos hasta llegar a su pecho, sus brazos sostenían un poco sus piernas y una de la parte de sus manos sostenía el regalo de su tercer aniversario.

Un anillo de compromiso...

.— Debes vestirte—. Dijo Jihyo en voz baja.— Debemos ir a hablar con PDI-nim—. Dijo acercándose a la la litera de la pequeña.—Vamos Chae-giee, el quiere saber qué pasó y qué sucederá después—. Dijo en un tono suave y empezando a subir, miró de reojo que jeongyeon se acercaba más.—Chae-giee, vamos tú siempre te levantas, debes superar esto—. Dijo sentándose aún lado si invadir su espacio no sabía hasta qué tanto era permitido acercarse.—Nosotras somos tus hermanas, no te vamos a dejar sola—. Dijo mirando a Jeongyeon y verla asentir.

Entonces Chaeyoung voltio por fin, miró un momento a su líder y luego miró a jeongyeon, pero de un momento a otro empezó a llorar de nuevo, recostando su cabeza en las piernas de Jihyo, y está en seguida le empezó acariciar su cabello.

El llamado de Chaeyoung era desgarrador y muy triste, dejó ver todo el dolor que sentía por no tener a su amada, a pesar de todo lo ocurrido la seguía amando con todo su corazón y si ella volvía, sin dudarlo, la perdonaría, por que ella no puede vivir sin sus caricias, su linda sonrisa, sus lindos lunares, la necesitaba para respirar, la necesitaba.

Pero ya no había vuelta atrás, su musa, su japonesa favorita, su Mina, se había ido, dejándola con un enorme hueco, en su ahora roto corazón, ese hueco era el que no la dejaba respirar y dolía, dolía como los mil demonios, como si le sacaran el aire con un golpe en la boca del estómago.

.—P-por f-favor Unnie, has que pare este dolor—. Decía la pequeña entre sollozos y bocanadas de aire.—Ya-a n-no pued-do más, por favor  —.
Esto último lo dijo con tanta súplica, que el corazón de sus Unnies dolía también, podían sentir ese dolor, era tan palpable el del de la pequeña, jeongyeon empezó a llorar un mar de lagrimas.—Unnie, d-dile que v-vuelva por favor, y-yo la p-perdonó—. Dijo esto último y empezó a llorar más fuerte, como si de un niño chiquito se tratase.