Episodio 4: Escena Cuarta

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Etereonodriza de la discográfica Oxion, Recinto Privado, jardines

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Etereonodriza de la discográfica Oxion, Recinto Privado, jardines.

A través del campo de fuerza que cubre los jardines puede divisarse el vacío etéreo, roto por coloridos cúmulos de neón en la lejanía. Varias bergalinas(55) en flor campanean emitiendo un siseo que atrae a las abejas y a las maras leonadas (56) que sobrevuelan la espesura y polinizan este pequeño ecosistema.

FINNEGAN pretende leer un libro de Antropología Gnóstica sentado en el banco que hay dispuesto bajo un sauce. Hace rato que su intento de disfrutar de una tarde de asuntos propios se ha visto truncado por dos factores. El primero es que no puede evitar rememorar el encontronazo entre la Capitana Lincoln y Sión, días atrás.

FINNEGAN

(piensa)

"Creo que quizás ha llegado la hora de hablar con la Capitana."

Pasa una hoja distraídamente siendo consciente de que no ha podido leer ni un párrafo. El ruido de los murmullos que se escuchan frente a él, así como el de sus propios pensamientos, no le deja concentrarse.

FINNEGAN

(piensa)

"Tengo que ayudarle a comprender."

(Escucha un silbido molesto y frunce el ceño, pero vuelve a retomar el hilo de sus pensamientos)

"No parece que SIÓN tenga intención de volver a comunicarse con ella en un futuro cercano, además..."

"¿Dónde está ese muchacho? Se las ingenia para esquivarme, en los últimos días solo me saluda en la distancia y cuando quiero encontrarle a solas, me resulta imposible."

(sonríe lacónicamente)

"Aunque creo que no soy al único al que evita, me parece que necesita estar solo."

(ahora es un tarareo lo que escucha y cierra el libro bruscamente)

"Pues suerte él que lo consigue."

Se da por vencido, deja el libro a un lado encarando la otra fuente de molestia, a mayores de sus pensamientos, que le impide concentrarse en su lectura. Paseando de aquí para allá, tarareando varios: "subidubi subiduá" y emitiendo silbidos rítmicos se encuentra el doctor Azalea, que recolecta muestras del jardín y los invernaderos para meterlas en pequeñas bolsas de alúmina.

FINNEGAN

(en alto)

¿Es necesario que vandalice los parterres, doctor?

DOCTOR AZALEA

¡Finnegan, colega! Hemos huido de la justicia juntos y hemos escuchado jazz codo con codo. Puedes tutearme.

La voluntad de la Estrella Hermética (Libro 1: La sala 9) (Borrador Pausado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora