𝐂𝐇𝐄𝐀𝐓𝐄𝐑

Noviembre, 1963:

—Lo maté...—Mire atónito al muchacho quien se encontraba tirado en el suelo inconsciente.—Lo mate..

—No todo es tu culpa, cariño.—Posicionó su mano sobre mi hombro.—Él se cruzó.

Mierda, mierda y más mierda. No debí montar la bicicleta, no quiero morir tras las rejas.

—Freddie tiene razón, culpa compartida.—Finalmente Roger comentó, cerrando su revista de autos.—Soy de la idea de irnos corriendo y dejarlo ahí.

—No podemos irnos, Roger.—Sequé el sudor que bajaba por mi frente.—Tenemos que hacernos responsables.

—Responsables mis pelotas, no estaré toda mi vida en una celda.

—Se está moviendo.—Freddie señaló al niño con una sonrisa de oreja a oreja.—¡Está vivo!

—Deberíamos irnos.

Ignoré por completo el comentario de Roger y ayudé al pequeño a levantarse.

—¿Cómo te llamas, cariño?—Intervino Freddie con su característica sonrisa.—¿Te sientes mareado?

Rezaba a Dios para que no haya provocado nada grave en su sistema nervioso.

—Un poco...—Asintió tímido sentándose en la vereda.—Soy John.—Sus mejillas se pusieron coloradas, no sabía si por el tremendo golpe que se llevó o la vergüenza que tenía en este momento.

—Mis disculpas sinceras, no fue mi intención golpearte.—Miré mis pies arrepentido.—No me había fijado en ti.

—¿Seguro que estas bien?—Volvió a preguntar Freddie.—Porque podemos llevarte a tu casa, cariño.

—Estoy mejor, gracias.—Sonrió con ternura.—No te preocupes..

—Freddie.—Completó la frase.—Soy Freddie, mucho gusto.

—Mis más sinceras disculpas, John.

—Brian..—Roger llamó mi atención.—Te dijo que esta bien.

—No te preocupes, los accidentes suelen pasar.

•••
¡Apareció el pequeño Deaky!
Sinceramente, se me ocurrió toda esta idea hace cinco minutos. Sin nada más que decir, espero que les haya gustado. ❤️
Ps: ¿Deaky o Deacy? (La Duda existencial que no me deja dormir)