Forzada a Amarte (Rubius y tu)[Adaptada]

Capítulo 6

HISTORIA Y CAPÍTULOS CORTOS

Rubén: De acuerdo, de acuerdo. Eso no nos lleva a ningún sitio. Si piensas que realmente no podrás enamorarte de mí, sal por esa puerta ahora.

______ le miró, incrédula.

Rubén: Vamos, puedes salir, está abierta... o quizás... hayas comenzado a sentir algo —dijo acariciándola el cuello.

______ corrió hacia la puerta como alma que lleva el demonio, pero Rubén no iba a dejarla escapar tan fácilmente; así cuando llegó y tiró de ella comprobó que estaba cerrada. Frenética tiró y tiró del pomo pero no consiguió nada; entonces oyó a Rubén reírse a sus espaldas y la furia la dominó por completo lanzándose contra él como un torbellino.

Tu: Eres un Estúpido, ¿cómo puedes jugar así conmigo? —decía mientras le pegaba y luchaba por arañarle. Quería matarle y él no dejaba de reírse... Cuando se cansó la inmovilizó contra su cuerpo y la beso. Ella no dejaba de revolverse bajo sus aprisionadores brazos.
Rubén: Vamos, cariño, estate quieta, con esto lo único que haces es impacientarme —dijo divertido
Tu: No seas Estúpido Suéltame.
Rubén: ¿Por qué? ¿Acaso no me deseas? —dijo intentando besarla de nuevo.
Tu: Suéltame de una vez.
Rubén: Contéstame: ¿No me deseas? ¿No te gusta mi cuerpo?
Tu: No, solo quiero que me sueltes. ¡Ya! —le ordenó ella.
Rubén: Vamos, estas temblando y he visto tu mirada en el baño, me deseas tanto como yo a ti - y volvió a besarla.
Rubén: No, no... —grito ella forcejeando asustada— ¿Es que no puedes pensar que tiemblo porque te tengo miedo y que sé que esto no funcionara por esa misma razón?

Rubén la tiró de nuevo contra el sofá.

Rubén: No digas eso... —El cambio fue radical y ahora estaba realmente furioso.
Tu: Pero es cierto... —dijo calmándose e intentando razonar con él.— No podré nunca enamorarme de ti porque te tengo miedo y una relación no puede basarse en el temor que yo siento, ¿lo entiendes?.
Rubén: Te he dicho que no quiero oír eso —su voz era gélida y cortante.
Tu: Lo siento, pero vas a tener que afrontar que nunca seré tuya.
Rubén: ¡No! —gritó levantando la mano para pegarle, pero al ver su aterrorizada mirada se contuvo y salió de la casa cerrando con llave.

______ corrió hacia la puerta hecha un mar de lágrimas, aporreo, pateó y tiró de la puerta, pero todo fue inútil... al final se quedó encerrada, sola y llorando. Él la había dejado sola... no se entendía a sí misma.
No se entendía a sí misma: no quería estar con él, pero tampoco podía soportar estar sola y encerrada. Con el llanto se quedó dormida en el sofá y cuando despertó sobresaltada por un ruido, escucho mejor y se dio cuenta que era un coche, el resplandor de los focos en el salón se lo confirmaron... Rubén volvía.
Esta podría ser una oportunidad para escapar. Fue corriendo a la cocina y cogió la sartén más grande que encontró y se colocó detrás de la puerta.

Rubén: ______, lo siento, no quiero que discutamos, me siento...

Pero ella le pego con la sartén tan fuerte como pudo, haciéndole caer al suelo como un muñeco.

Tu: Espero no haberle matado. — soltó la sartén y corrió fuera de la casa, apenas se veía nada, el coche estaba abierto y subió pero las llaves no estaban. Daba lo mismo, tenía que recordar como se hacía un puente. Para eso había estudiado mecánica...- se decía mientras se metía bajo el volante.
Tu: Rojo, verde, azul...Aaaah!!, estos coches automáticos son lo peor. — conectó dos cables pero no pasó nada. — Vamos, vamos, esto no puede ser tan difícil.
Rubén: ¿Te sería más fácil con esto? — dijo desde el otro lado de la ventanilla con las llaves tintineando en su mano.

______cerró la puerta, pero Rubén no se lo iba a permitir y de un golpe rompió el cristal de la puerta justo en el momento en que ella conseguía arrancar.
Pero algo iba mal, la dirección no respondía, el volante estaba muerto, e iba irremediablemente de frente contra un árbol con el cual choco golpeándose con el volante en la cabeza. De repente quedo cegada por la sangre, no veía nada, solo oyó como se abría la puerta y la sacaban del coche.