ᵘᵗᵒᵖⁱ́ᵃ | ᵏᵒᵒᵏᵛ

✨14

—Estás en lo cierto, siempre lo estás. A demás ya te dije que comí hace poco, ve y diviértete, dale un beso a HyeHye de mi parte.

Su sonrisa cínica no desaparecería por nada del mundo, ella era así, su orgullo y ego la mantenían sellada. Claramente me había dicho eso de ir a comer con un amigo para que yo se lo contara a mi padre, cosa que no haría, solo por el hecho de no darle gusto y no causarle malestar a mi padre.

—Cuidate, noona. —me despedí seguro.

Antes de que pudiera cruzar por completo el umbral de la puerta ella volvió a llamarme.

—Jungkook, te lo digo porque soy como tu madre y te quiero. Deberías de cuidar más a tu novio, de estar seguro que te regresa todo el cariño que tu le das.

Su lascividad me desconcertó, parecía que vacilaba conmigo al decir aquello, como si supiese algo, que hasta cierto punto le divertía y eso no hacía más que helarme la sangre.

—¿De qué estás hablando?, sabes bien que Mingyu y yo nos amamos. Nos tenemos la confianza suficiente como para estar preocupándonos por inseguridades, tu bien sabes el buen chico que es él.

—Si lo se, bonito, creeme que lo sé de sobra y es por eso mismo que te lo digo. Él es alguien muy astuto, Jungkook.

—¿Por qué siento que no me estás diciendo algo?, ¿por qué de un momento a otro sacaste este tema?, que me parece una tontería total porque nuestra relación es limpia y transparente.

—Ay, Jungkook, tu enserio eres tan ingenuo, solo ves las virtudes de las personas. Eso es peligroso y sobre todo en estos casos que ni siquiera puedes darte cuenta de lo que pasa a tus espaldas.

—¿Qué insinuas?, ¿qué es lo que pasa a mis espaldas?, tu sabes algo y probablemente algo en lo que no pueda creer abiertamente. Estas acusando a mi novio de algo muy serio, noona. —dije ya molesto.

Su sonrisa se fue, dejó la copa de vino en un costado de la barra y se bajó de esta con un pequeño salto, se acercó a mi moviendo sus caderas. Nunca me gustó del todo la forma en que me miraba, desde que unió nupcias con mi padre siempre vi cierta mirada en ella, una que me incomodaba, debido a que era algo sugerente.

Incluso Mingyu llegó a decirme que eso no era del todo normal, no era el comportamiento apto de una madrastra y yo solo por respeto hacia ella como mujer de mi padre, nunca dije nada, eso no quería decir que no me desagradara.

—¿Quieres saber?, ¿quitarte esa venda de los ojos, bonito?, lo sabrás y me encargaré de eso, de revelar a tu novio infiel. Vuelve después de comer, con sumo silencio entra y sube al despacho de tu padre. Todo estará claro para entonces. Y espero que sepas ser agradecido conmigo, todo esto lo hago porque te quiero y necesito que veas lo importante que eres para mi, Jungkook.

Su indice viajo hasta mi hombro y lo acarició con lentitud. Alejé su palma un tanto desorientado y la miré perplejo.

—Y yo espero que estés consciente de lo que me estás proponiendo, si es una mala broma o un simple juego, no voy a perdonartelo, porque a parte de que te estas metiendo en mi relación, estas acusando a Mingyu de infiel y a mi de imbecil.

—No de imbecil, bonito, de ingenuo.

—No veo la diferencia.

—Pronto la verás. Estaré esperándote con los brazos abiertos, Jungkook, no dudes en venir a mi.