Te Siento (Andrew Garfield y tú)

Capítulo 32

Electro comenzaba a retorserse y soltaba más chispas de lo normal, las alas de Buitre aún no tanto pero se podía ver un pequeña cantidad de ellas: la lluvia.

En mi mente comencé a razonar- Electro al estar tan cargado es 10 veces más fuerte, pero también sencible así que el agua le afecta- Comenzó a desplomarse; al verlo en el suelo los policías pensaron que sería de ayuda el seguir disparándole; pero en realidad se notaba que era una mala idea.

- No dispa...- Buitre no me permitió acercarme tomándome con sus garras rasgando parte de mi traje- ¿qué solo sabes hacer eso?- Electro comenzó a molestarse por las balas, Octo estaba  tratando de esquivar de igual manera pero sus movimientos ya eran muy torpes. Puse mis ojos en el tipo azul- va a crear una onda de energía...

Con un golpe trate de sacarme de buitre, tuve mucha suerte al poder soltarme.

- Ven por mi pajarito- corrí en dirección a Octo pasando por debajo de él con la ayuda de mi telaraña, causando que Buitre se golpeará contra él.

¿El resultado? Un dominó. Por la fuerza de Buitre quedaron encima de Electro, arrastrandome con ellos gracias a mi grandiosa idea de lanzar la telaraña la cual se enredo, recibimos toda la descarga que él tenía preparada junto al hidrante que se rompió por nuestra culpa.

Dolió mucho... Pero ninguno podía moverse. Gracias al cielo los policias ni estaban tan cerca de nosotros, pero eso no les evito el venir corriendo y atraparlos a todos.

Esto aún no me tiene tranquilo, se que saldrán de ahí más fácil de lo que yo tarde en meterlos.

De entre los pocos escombros, me ayudaron a levantarme. Partes de mi traje estaban rasgada dejando expuesta mi ensangrentada y lastimada piel.

El dolor de cuerpo era mayormente notable, sin embargo, Lissa era primordial para mi ante todo. Después de agradecer a las personas que me ayudaron a levantarme fui en su busqueda; presentiento que estará muy angustiada... De alguna manera esto me hace sentir culpable, no quiero que ella se sienta insegura.

Después de unos segundos columpiandome la vi: hecha un ovillo pegada a una pared con una techumbre que la cubría de la lluvia. Los latidos de mi corazón se hicieron dolorosos al ver esa escena.

- Lissa - ella levantó la cabeza de entre sus piernas- estoy frente a ti- ella se abalanzó hacia a mí y yo solo la recibí entre mis brazos- Tranquila. Se que esto está muy mal, pero debemos ser fuertes.

- Lo sé. Pero ahora sí tengo mucho miedo, se que soy fuerte pero... M-me apunto con una pistola... Yo no le hice nada. Y me dijo...

- ¿Te amenazó?- me separe un poco para verla.

- Me dijo - hablo un poco más bajo- que me uniera a él. Que pensaba engañarte gracias a mi intervención en su plan para así deshacerse de ti, que el me pagaría mi propia exposición de pintura y que si no lo hacía... - se quebró en llanto. Limpié sus lágrimas y con mis dos manos levante su rostro.

- Si no quieres decirme ahora yo entiendo-ella negó.

- Dijo que él dañaría a mi papá.

- Hijo de... - golpeé la pared que estaba cerca de nosotros por el coraje- v-vayamos a donde te dejo tu padre. Por favor trata de relajarte, se que no es justo para ti pero pondríamos más en riesgo a tu padre. Iré a visitarte por la noche asi que necesito que estés atenta- levante un poco mi máscara para así besar si frente uniendo nuestras narices terminando en un beso.

Me quejé un poco por el dolor en mis heridas, causando que ella se separara rápidamente tocando por encima mis heridas en el pecho.

- Peter, estas muy mal herido. Por favor, vayamos con mi padre rápido para así ayudarte con esto en casa.