—¿Quién eres?

—¿Qué? ¿De qué hablas? ¿Tú quién eres?

—Soy Emilio Osorio ¿Te suena? Y tú...

Joaquín me miró alterado. Salí corriendo al balcón, aún con una sábana cubriendo mi cuerpo desnudo.  Cerré la puerta de cristal en cuanto salí, dejando a Joaquin dentro.

—Soy Kevin Torres ¿Te suena?

—Yo...

—Tú nada, seguramente has escuchado mi nombre, al igual que yo el tuyo. No tienes el derecho de tomar el celular de Joaquin sin su permiso, no pasa nada si tienes autorización, pero por el alboroto supongo que no. Así que te pido que me comuniques con Joaquin.

—Él no quiere hablar contigo. Además, tú no tienes el derecho de subir fotos sin la autorización de Joaquin, cuando sabes perfectamente que él aún no sale del closet...

Joaco golpea el vidrio.

—Yo no fuí, pedazo de imbécil, ni siquiera sabía de esas fotos ¿Por qué no le preguntas a tu amiga Renata? ¿Eh?

—¿De qué hablas?

—Tuve pedos con ella hace poco, sin querer metí a Joaquin en esto... Le dije que yo había preferido a él mil veces más que a ella. Se molestó bastante y... Supongo que subió eso.

—Eres un imbécil ¡A Joaquin no lo vuelvas a meter en tus pedos! Y no intentes arreglar esto, yo lo haré —terminé la llamada.

Olvidaba lo perra que puede llegar a ser Renata Guerra. Todo éste tiempo me pareció hipócrita, sin embargo, sabía lo importante que era ella para mí niño... Pero no estoy dispuesto a dejar pasar esto desapercibido.

Abrí la puerta, y Joaquín se encontraba vistiendo.

—¿Me puedes regresar mi celular? —preguntó molesto.

—Fue Renata.

—¿Enserio lo creíste? Neta wey, cada vez me decepcionas más —dijo mientras metía sus brazos a las mangas de su playera.

—Joaquin, ni te imaginas la clase de persona que es esa... —me interrumpí antes de insultar.

—¿Esa qué? ¿Esa qué, Emilio? ¡Contesta! —empujó mi pecho.

—Tranquilo —tomé sus muñecas.

—Estoy seguro que fue él... Debes créeme —sus lágrimas rodaron por sus rojas mejillas.

Traicionado por sus sentimientos, en una lucha por comprender todo lo que le estaba pasando cayó rendido; dejó de luchar y me abrazó por la cintura, aferrándose a mí.

Y es aquí cuando me preguntó ¿Por qué las personas maravillosas son aquellas que más sufren? ¿Por qué Joaquin? Odio cada vez que mi niño llora, y no puedo hacer nada al respecto. Quisiera abrazarlo y jamás soltarlo, pues temo a que algún día no pueda soportar más y se derrumbe.

—Debes entender que es muy probable que ella haya sido. Quería a Kevin ¿No? Además nunca se ha alegrado por tí, al contrario, envidia el éxito que tienes ahora, también...

—¡Basta! —interrumpió.

—Solo piénsalo ¿Por qué no solo lo aceptas?

—Porque tengo miedo de que mis sospechas durante todo éste tiempo sean ciertas...

—¿A qué te refieres?

—A que... Ella nunca ha sido una buena amiga. Solo diré eso.

—¿Sabes que no la necesitas, y qué yo siempre estaré para tí? No importa que tan mala sea la situación... Yo lo voy solucionar todo.

—Deja de ser tan lindo conmigo cada vez que la cagas. Solo déjalo así, por favor.

—Joaquin... Siempre voy a luchar por tí. Quiero que estés bien, que no sufras...

Me miró un par de segundos antes de subir a mi regazo. Retiró la sábana de mi torso, dejando que solo cubriera mi entre pierna.

Tomó mis manos, llevandolas a sus glúteos, las suyas las posicionó en mis hombros.

—Hazme tuyo... Te toca —dijó en voz ronca.

—No Joaco, hablo enserio. Quiero que entiendas que para mí no solo eres sexo.

—¿Entonces qué quieres? —preguntó en voz baja y entrecortada gracias a la aproximación de su llanto.

—Te quiero a tí de todas las maneras posibles, quiero estar contigo, cuidarte, apoyarte cuando sea necesario, escucharte en los momentos más importantes o los más dolorosos. Déjame pertenecer a tu vida —tomé con amabas manos sus mejillas, estrujando lo suficiente para que se formara un "piquito" en su boca, el cual no dudé en besar.

—No puedo creerte, me has lastimado lo suficiente para intentar huir de tí cada vez que me haces sentir especial.

—Joaquin... Bonito, solo entiende que yo te amo, te amo mi niño —uní muestras frentes.

—¿Lo dices enserio? —sus ojos se cristalizaron y su voz se hizo aguda.

—Nunca había estado tan seguro... Te amo Joaquin.

Sus bracitos rodearon mi cuello. Sus lágrimas humedecen mi hombro. Ambos nos aferramos el uno al otro.

—Yo también te amo Emi —lo separé de mi.

—¿Enserio? ¡Me amas! ¡Mi niño! —respondí emocionado, haciendo mi voz aguda —Dilo de nuevo.

Joaquin negaba con la cabeza. Lo tomé por la cintura, haciendo cosquillas en ella.

—Dilo —lo arrojé a la cama debido a los movimientos tan bruscos de Joaco.

—¡Basta! ¡Emi! —gritaba entre carcajadas.

—Voy a parar si lo dices —subí a su torso.

—Te amo ¡Te amo! ¡Te amo Emilio!

—¡Te amo Joaquin! ¡Te amo! ¡Eres la persona más increíble que he conocido!

—Te van a escuchar —cubrió mi boca—. Recuerda que aún sigues con María.

Retiré su mano de mis labios.

—Te prometo que voy a terminar con ella.

—Emilio... —salió de la cama, sentándose en el borde— Quiero hacer las cosas bien. No me parece correcto que estés engañando a María de ésta manera, siendo yo cómplice. Yo solo seguiré con esto, cuando esa relación haya terminado... Lo siento.

—No te preocupes mi amo... Joaco, te entiendo. Pero necesito que tú me entiendas, no puedo terminarla de la noche a la mañana y por mensaje.

—Esperarás a que llegue...

—Si...

—¿Me das un último beso?

—Encantado.

Tomé sus hombros y lo recosté sobre mí, enredé mis piernas en su pequeña cintura. Nos miramos fijamente antes de dar inicio al beso más significativo en nuestra historia, o eso es lo que yo sentí.

Cada vez estoy más seguro de lo que siento por esta pequeña persona, con los ojos más bonitos de mundo. No hay miedo, sé lo que perfectamente debí hacer a partir de ahora... Lo correcto.

⚫⚫⚫⚫

Hola lectores, soy yo de nuevo 🤠.

Mil disculpas por no subir capítulo en tantas semanas, pero el estrés del semestre no me daba absolutamente nada de inspiración. Pero aquí estoy de nuevo para escribir drama.

La historieta dará un saltó en el tiempo, de no ser así esto estaría muy largo y tedioso.

Gracias por esperar ❤️. Los amo 😘



EMILIACO 🏳️‍🌈. #Wattys2019Where stories live. Discover now