Opuestos ♥HunHan♥

Epílogo.

Luhan se encontraba empacando su ropa mientras Sehun, quien estaba a unos cuantos centímetros, hacía lo mismo ayudándole. Y muchos preguntarán ¿Por qué demonios están alistando maletas? Bueno, han pasado 3 meses y ambos habían tomado la decisión de dar un paso más a su relación. Es por eso que habían decidido en vivir juntos pero no...no vivirían en casa de Sehun, ellos vivirían en SU casa.

-Amor, ¿Tienes todo no es así?- preguntó Sehun colocándose detrás de Luhan y abrazó la espalda colocando sus manos en el vientre de 5 meses del mayor.

- Si, solamente era mi ropa y algunas cosas que compré hace un tiempo.

El menor asintió y dejando un beso en su mejilla se retiró con las dos maletas que estaban ya listas en la cama. Muchas cosas habían pasado en esos cortes tres meses y una de ellas era que Sehun le había propuesto matrimonio, a decir verdad el recordarlo le hacía sonreír bastante pues ahí pudo ver la reconciliación entre él y su madre, su ahora suegra.

Flashback.

-Luhan...tú qué eres mi hermoso lucero, tú que eres aquella estrella que brilla con intensidad en aquel cielo nocturno. ¿Te quieres casar conmigo?.

Sehun se encontraba practicando ante el espejo y debido a que no le convencía seguía ensayando, sin embargo, no se imaginó que su madre llegaría y lo encontraría arrodillado frente al espejo con una cajita de terciopelo azul.

-¿Cómo que casarte, Oh Sehun?

- O..Omma, ¿qué haces aquí?.

-¿Cómo que que hago aquí? Aquí vivo por si no recuerdas. Mejor explícame eso de que te quieres casar.

-Yo...no es algo que debas saber. No es como si en verdad te importara.

-Claro que me importa eres mi hijo y tengo que saber con qué arrastrada o arrastrado piensas casarte.

-No se nota que sea tu hijo y además Luhan no es ningún arrastrado, espero y cuides tus palabras de mi futuro esposo.

-Esta bien, no debí decir eso. Es solamente que no quiero que salgas lastimado, sé que no he estado como cualquier madre haría pero debes saber que el ser CEO de una empresa es un trabajo difícil y a veces debes sacrificar lo que más amas. Es por eso que te pido perdón, Sehunnie...por todo el tiempo que me alejé de mi niño de sonrisa radiante, te suplico que me perdones.

Aquellas palabras habían hecho que el corazón de hielo y aquella fachada de chico frío se desvaneciera, eso solamente lo había logrado Luhan pero aún así sabía que su madre tenía razón. Se dejó guiar solamente por su dolor sin imaginar que su madre también estaba sufriendo en silencio debido a que había dejado a su pequeño por ocupar un puesto que no ella misma quería pero no había tenido opción. Con un nudo en su garganta se acercó a su madre y la abrazó con fuerza dejando que lágrimas adornaran sus mejillas, hace mucho que había deseado un abrazo de su madre y vaya que lo necesitaba. Su madre por su parte había terminado en llanto mucho antes de que Sehun se acercara, sin embargo, sabía que ahora que su hijo estaba por tener una etapa importante en su vida debía dejarlo ir pero eso no le impediría pasar tiempo con él y conocer a la pareja de su hijo.

Poco tiempo después se escuchó un sollozo extra y se escuchaba de afuera de la habitación. Sehun extrañado abrió la puerta y se encontró a Luhan a moco tendido tapando su boca, el mayor no pudo evitar lanzarse a los brazos de Sehun y seguir sollozando.