Capítulo 20: Aves de mal agüero

193K 8.8K 1.5K
                                    

Entro a la primera clase del día con mucho sueño, quería quedarme durmiendo en mi casa, pero no podía porque hoy tengo examen de matemática.

Sobre el que no estudie, por cierto.

Cuando lo termino, Salgo a la cafetería con la frente sudada por todo el estrés que me trajo el examen, no estudie, pero pude resolver todo con algunos problemas que tuvieron solución luego de acosar a la profesora con preguntas.

—Estuvo rudo, casi no lo termino—Le digo a Alex cuando vamos caminando por el pasillo, me peino con la mano el cabello acomodándolo en su lugar.

—A mi me falto la ultima, no tuve tanta rapidez porque la tres se me complicó—Dice negando con la cabeza.

—Esperemos que todas las demás te hayan salido bien, amigo—Digo sonriéndole —Yo espero lo mismo con el mío.

Entramos a la cafetería y veo a Stephany y a Marensik ya sentadas hablando. Sonrío cuando las veo.

—Hola—Dice Alex sentándose al lado de su amada y dándole un beso en el cachete—¿Cómo están?

—Bien, pegajoso—Le dice Mare a Alex empujándolo suavemente para que se aleje de ella.

Marensik siempre se ha hecho la difícil con Alex, no sé cuando admitirá que le gusta tanto como él a ella. El miedo de que esa relación dañe su amistad no la deja seguir. Y es comprensible, tiene miedo de perder a uno de sus mejores amigos en caso de que como pareja no funcionen.

—Hola—Digo dándole un beso en los labios a mi novia quién gustosa me lo devuelve dándome otro cuando me alejo— ¿Qué hacen?

Empiezan a hablar sobre no sé quién, que hizo no sé qué cosa y la verdad no le prestó mucha atención a sus chismes ya que solo quiero darle besos a Stephany.

Kira llega y se una a la conversación, no es de mi agrado cuando llega Logan y se sienta a su lado, mucho menos cuando deposita un beso en los labios de mi hermana para luego irse a la barra de comida.

Aprieto mis puños debajo de la mesa sin que nadie se dé cuenta, trato de disimular mi molestia lo mejor posible para no hacer sentir mal a Kira ni incomodo a nadie.

Una figura femenina se sitúa a mi lado haciéndome levantar la cabeza para ver de quién se trata: Raquel.

—Hola—Dice sonriéndome lobunamente, voy a sonreírle cuando recuerdo donde, con quién y en modo de qué estoy y quito rápidamente mi sonrisa— ¿Podemos hablar, Ethan?

Ella trata de ser lo más sensual que puede para chocarle a las chicas, esa actitud antes me habría causado gracia y hasta sexy me habría parecido, pero ya no, no cuando tengo a mi novia sentada a mi lado y dos pares de ojos de dos locas rubia y pelinegra que solo están esperando una falla de Raquel para comérsela viva.

—Estoy hablando de algo aquí, no puedo—Le digo haciéndole señas con los ojos, tratando de que capte y no insista.

Si quiere hablar conmigo, que me busque luego y la escucharé, pero ni loco hablaré con ella ahora.

—Bueno... igual tengo que decirlo—Dice cruzándose de brazos— Hay un rumor de ti en el instituto y es mejor que te encargues de eso, ya que te están dejando mal.

— ¿Qué dicen? —Es lo que pregunto con el ceño fruncido.

—Están diciendo que tú y —Mira a Stephany con una mueca de desagrado— Y ella son novios, que te le declaraste y que Ethan Williams ahora es un hombre amarrado, todos sabemos que...

—Es verdad— Le digo cortando lo que sea que iba a decir.

— ¿Qué? —Ella se ve más sorprendida de lo normal, no puede creer lo que digo y abre y cierra la boca buscando las palabras adecuadas— ¿Eres novio de está?

Hasta el más mujeriego se enamora •Editando•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora