Tentación - En proceso de corrección

11. Besos en la Oscuridad y Un Primer Baile.

Subimos las escaleras, lo lleve en dirección a mi habitación, me sentí tímida cuando él entro y se quedo observando todo a detalle… odio sentirme tímida pero cuando Dylan está cerca es inevitable.

-Comencemos el trabajo, tengo que ir al gimnasio hoy – dije rompiendo el silencio, Dylan se sentó en la alfombra y recargo su espalda en mi cama.

-Creí haber escuchado que no tenias permiso para salir Gnomo – dijo divertido. –Diablos!!... no me digas que te estás revelando, eres toda una chica mala Taylor.

Sonreí. – Mejor empecemos el trabajo.

Comenzamos a trabajar en el proyecto que teníamos que exponer la próxima semana en clase de historia, era sobre las culturas antiguas. Tardamos como tres horas, luego de eso Dylan se fue a su casa a cambiarse porque al parecer también iría al gimnasio. Cuando salí de casa estaba lloviendo más fuerte, incluso se veían algunos rayos. Me fui en mi auto para no mojarme y cuando llegue al gimnasio me puse a hacer mis ejercicios de siempre, Emily y Ryan llegaron empapados unos minutos después.

-Hace mucho que no llovía así – dijo Ryan alegre mientras me daba un beso en la frente a modo de saludo y se iba a los vestidores de hombres.

-Taylor!... mi querida amiga – dijo Emily riendo mientras me daba un abrazo, ella estaba empapada igual que Ryan, así que cuando me abrazo me empape también.

Reí y continúe con mis ejercicios, Dylan apareció a un lado de mí, tenía una botella de agua en la mano.

-¿eso es sudor? – pregunto.

-No, claro que no – dije poniendo los ojos en blanco.

-Entonces ¿Qué paso? – dijo mientras tomaba un trago de agua de su botella.

Me encogí de hombros – Al parecer hoy es el día de mojar a Taylor – En cuanto termine de hablar, Dylan escupió el agua que traía en la boca y comenzó a toser.

 -Eso sí que es una invitación…. Pero que no te oiga otro que no sea yo, no queremos que otro te moje ¿verdad Gnomo? – dijo con una sonrisita seductora una vez que dejo de toser.

-¿De que habl… – Comencé a decir, pero luego entendí a lo que se refería y entrecerré los ojos – Eres un pervertido Dylan.

Comenzó a reír… mierda se veía sexy cuando reía, después de eso continuamos cada quien entrenando y cuando tuve suficiente fui al vestidor de chicas a ducharme y cambiar mis ropas de deporte por unos jeans, una blusa de manga larga y mis converse blancos, Emily se había ido hace unos minutos, al igual que la mayoría, la lluvia seguía cayendo con fuerza en el exterior. Estaba secando mi cabello cuando Dylan entro en el vestidor con Jeans negros y una camiseta blanca.

-¿Cómo iras a casa? – pregunto mientras entraba y se quedaba parado frente a mí con los brazos cruzados.

-En auto ¿Tu? – pregunte poniéndome de pie para guardar mis cosas.

-Pensaba tomar un taxi, afuera es un desastre y no quiero arruinar a Shai. – dijo él.

-¿Quién es Shai? – pregunte frunciendo el ceño, me molesto pensar que podría ser una conquista suya.

-Mi moto, el señor Mason me dejo guardarla aquí y mañana cuando vuelva me la llevare. – dijo encogiéndose de hombros.

-¿Tu moto se llama Shai? – pregunte con una risita.

-Oye no te…- estaba diciendo él, pero fue interrumpido por el fuerte sonido de un trueno, luego se fue la luz de repente, dejando todo oscuro.

Otro trueno se escucho haciéndome gritar más de la sorpresa que del susto.