Capitulo VI: Pruébame.

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Ambos seres de hueso llegaron al mundo original de la muerte "Reapertale". Geno fue conmovido por ver la luz del sol, por primera vez en su vida sabía la sensación de estar en la superficie. Todo lo que había vivido eran receteos constantes, pesadillas, dolor, muerte y finalmente estar dentro de la oscuridad. Prácticamente un año en soledad y locura.

Pero, el destino es incierto.

Tan solo hace unas horas se encontraba suplicando por morir en su punto de guardado, pero ahora tenía una nueva oportunidad para continuar y todo gracias a Reaper, un nuevo "amigo".

- Bueno, deja de llorar. Me lo podrás agradecer después. Te llevaré a casa.-

- ¡Dame un momento para ver este hermoso paisaje! Solo... quiero tener esta imagen en mis recuerdos para siempre- Ambos esqueletos estaban en la punta de un monte, se podía ver a lo lejos el atardecer anaranjado, montañas cubiertas por arboles de diferentes especies y tamaños, el canto de las aves resultaba ser una delicada melodía llena de vida.
Pero había un punto oscuro; de toda esa hermosa naturaleza llena de vegetación terminaba en la penumbra.
Desde lejos se notaba como una neblina opaca y densa cubría esa sección del bosque a la lejanía.

-¿Qué hay ahí? Se ve jodidamente horrible y podrido.- Señalo el esqueleto herido hacia la zona lúgubre.

-¿Encantador no es así? Ahí está tu nuevo hogar, nena.- Respondió Reaper orgulloso de su territorio.

Geno al escuchar aquello, decidió ignorar como lo había nombrado <<"nena">>, lo único que le importó mentalmente fue: "¡¿En ese jodido lugar viviré!?" Solo pudo pensar en eso.

La deidad tomó la mano de Geno, guiándolo a un camino tenebroso de naturaleza muerta y una aura lúgubre.

-Espera, espera ¿Me llevarás a ese bosque feo?- Vociferó Geno un tanto preocupado, mientras era jalado de la mano hacia la oscuridad del boscaje.

-Oye, no seas tan duro. Es mi hogar, ¡El mejor de todos!.- Contestó Reaper animado.

Ambos personajes esqueléticos caminaban en aquella densa zona muerta de vegetación. Entre pasos torpes y chistes morbosos por parte de la muerte, poco a poco llegaron a una cabañuela.

Aquella cabaña era muy similar a la casa de Geno en su universo, pero esta singular vivienda de madrea se veía mucho más grande: de color negro, tenía ligeros acabados elegantes en las esquinas, estaba rodeada de velas para alumbrar, las cortinas eran de un color beige claro, en el pórtico se encontraba un tapete de bienvenida que decía "Dulce Muerto-Hogar".

-Wow, tenías razón, no está tan mal.- Comentó el semi-muerto mientras se acercaba al pórtico, para limpiar sus pantuflas en el tapate de entrada. Reaper solo respondió con un ligero "Seh"

La muerte sacó del bolsillo de su túnica una llave para disponerse a abrir la cabaña, Geno simplemente se quedó detrás de este.

-¡Paps! ¡¡Bro!! ¡Estoy en casa!- Gritó Reaper.

Un momento, ¿"Paps"? Así es, Geno escuchó aquel sobrenombre, el semi-muerto había olvidado que la muerte era una versión alterna de él mismo, literalmente un Sans; esto significa que...

Si hay un Sans, estará su Papyrus.

-Humm, que raro. Parece que no ha llegado aún, de seguro la cosecha de almas está un poco complicada.- Dijo la muerte mientras cerraba la puerta.
Saber que Papyrus no estaba, le daba la oportunidad de pasar "tiempo de amigos" con su nuevo colega zombi.

La muerte con un semi-muerto.Where stories live. Discover now