Eso me trae aquí, el destino nos quiere ver juntos de nuevo, el trabajo nos quiere ver juntos, al igual que los fans y yo. Estamos compartiendo un delicioso desayuno antes de comenzar a grabar una emotiva escena de compromiso.

Omití leer la líneas de Joaquin y me limité a memorizar las mías "Me estás proponiendo matrimonio" "Si, aceptó. Es una promesa". Todo con un enorme sonrisa mientras miró a Temo. Lo que me lleva a pensar que nuestros personajes se casarán antes de que él se vaya a ciudad de México.

Joaco me mira de reojo desde el otro lado de la mesa. Es tan diferente la sensación al verlo ahora, cuando un par de noches atras su cuerpo desnudo adornaba mi cama. Supongo que los chupetones en su cuello no se han ido, por lo que constantemente acomodaba el cuello de su camisa ¿Morada?

Mientras estudia su libreto sonríe tiernamente, y sorbe la pajilla de su malteada de fresa. Intento ignorar los sucios pensamiento que llegan a mi mente en estos momentos.

—¡Emilio, Joaquin, les toca! —gritó mi papá desde la puerta del set de grabaciones.

Ambos nos dirigimos a grabar, después de corregí maquillaje y peinado, nos colocamos tal y como habíamos terminado la escena anterior; Joaquin de rodillas frente a mí con un anillo de compromiso. Yo aguardo en las escaleras.

—¿Están listos? Primer ensayo en...

—No, no, no preferiría repetirlo una sola vez. Me siento listo —interrumpió Joaquin.

—¿Estás seguro? —preguntó Juan.

—Si, lo he estado practicando.

—Por mí está bien ¿Qué opinas Emilio? ¿Estás de acuerdo?

—Si, si, yo solo tengo dos líneas —sonreí tonto.

—En ese caso. Capítulo 129, Escena 45 toma uno ¡Acción!

Joaquin miró la pequeña caja en forma de piano, que contiene el anillo, entró en personaje y me miró.

—¿Me estás poniendo matrimonio? —dije en un tono incómodo, quizá mi papá repita la escena.

Aún puedo ver un poco de odio en su mirada, pero se regularizo, en cuanto termine mi línea.

—No... Tahi —bajo la mirada— Quiero que este sea un anillo de promesa. La promesa que no importa la distancia, nunca habrá distancia real entre nuestros corazones.
 
Sentí como un nudo se formaba en mi garganta impidiendo que formará esa dulce sonrisa y solo apretara los labios, intento sonreír pero es imposible. Quién está frente a mí no es Temo, él es Joaquin, conozco esa mirada. Sus palabras son para mí, no para Aris...

—Justo como éste anillo, que forma un círculo interminable... Nuestro amor nunca va a terminar... Es infinito.

Me está destrozado completamente. Las ganas de llorar, abrazarlo, besarlo y decirle cuánto lo amo nublan mis sentidos.

—Y en la prueba de que aún no sabemos que nos depara el destino, pase lo que pase vas a tener éste anillo en tú mano. Que en algún punto del universo existe un hombre que te ama con toda el alma...

Fueron palabras suficientes para que mi llanto saliera a la luz. Joaquin, me tienes a tus pies. Ver sus ojitos cristalizados me está matando lenta y dolorosamente. Sé que está diciendo la verdad, no está actuando.

—Alguien que como hoy, cada día festejará, y agradecería tu vida. Alguien que está dispuesto a dar la vida por tí.

—Acepto es una promesa —apenas pide gesticular.

Miré el anillo. No me importa su valor material, porque ahora ha adquirido un mayor valor sentimental para mí. Una promesa para mí Joaquin, algo que me une a él.

Debía de darle la mano, pero en cambio, salí de mi personaje, olvide que todos estaban ahí.

—Te juro que algún día te voy a entregar una argolla también —nos miramos por un instante, Joaquin se tensó—... Y en ese momento, se va a significar otra cosa.

Joaquin solo negaba con la cabeza, sé que él aún me ama... Lo sé, y no saben lo feliz que me hace.

—Nuevos planes para nosotros —sonreímos, y tomamos nuestras manos.

—¡Corte y queda! No mamen pinches mocosos, son unos cabrones —apareció mi papá alardeando y aplaudiendo.

El foro se llenó de aplausos, y algunas que otras lágrimas. Joaquin aún sostenía mi mano, antes de que mi papá lo abrazará.

—¿Y ese llanto, mi niño? —tomó mi rostro con fuerza y beso mi frente.

—Emm, lo habíamos practicado ¿No es así Mailo? —contesto entre dientes, Joaquin.

—Si, fue así —le dí una mirada de agradecimiento.

Salimos del set, nuestras escenas juntos habían terminado. Habitualmente, caminaba directamente a mi auto, pero ésta vez decidí pasar a la oficina de mi papá.

Debo pedirle algo, muy importante.

—Hola señor productor.

—¿Qué pasó Emilio?

—Quiero pedirte algo...

—¿Qué cosa?

—¿Me puedo quedar con el anillo? —supliqué.

—No.

—¿Qué? ¿Por qué?

—Solo bromeó, si claro que sí... Te lo ganaste.

—Gracias... Gracias —lo abracé— Luego te veo.

—¿Qué ya te vas? —giró su silla a mi dirección— Quiero hablar contigo...

—¿Acerca de...

—Acerca de la noche en que Joaquin se quedó a dormir en la casa —su tono tan serio me intimida.

—¿Qué hay con eso?

—Escuché... Algo particular.

No me puede estar pasando esto a mí, necesito un temblor, o un fin del mundo que me salve de esta puta incómoda situación.

—No... Yo..

—Dejame hablar, Emilio. Yo sé que ya están grandes y ustedes deciden de su sexualidad pero ¿Ponerse a ver porno justo cuando estoy ahí? No hijo.

No pude evitar contener la risa.

—Lo siento, es que... Creímos que estabas dormido.

—La siguiente... Más discreción —guiñó su ojo.

⚫⚫⚫⚫
Lo sé está un poco corto pero necesito que me ayuden a decir ¿Qué es lo prefieren?

🇦Que la historia siga su ritmo como en la vida real? Me refiero a la obra y que termine con María hasta estás fechas, el viaje de este fin, etc...

🇧Que la historia tomé otro camino, ya sea que termine con María antes y no sea tan basada en lo real.



 

EMILIACO 🏳️‍🌈. #Wattys2019Where stories live. Discover now