¿Es obvio, quien es el Alfa y quien el Omega ?

10!

- CALLATEE BASURA.- me desvesti y me quedé con la navaja.

Entre sus gritos de desesperación mientras rasgaba sus ropas y tocaba con descaro muchas partes de su cuerpo, comencé a pasar y rasgar con el cuchillo sus brazos y piernas.

- Basta, por favor, me duele! - gritaba, para hacer su tortura más corta, lo puse en cuatro y abrí sus piernas.

- Noooo !nooooo !- grito.

Me acerqué lo más que pude a su oído.

-No te voy a violar, solo si cuando empiece en embestir, gritas como si te penetrara.- dije.

- Sueltaaamee! No me toques !- grito.

Fue respuesta suficiente.

Con el cuchillo hice una leve insicion cerca de su ano, y grito muy fuerte.

- Basta, basta, por favor!- sollozaba.

Estoy seguro que las lágrimas son del corte.

- SUELTAAAMEEE.-

- eres una perra y sirves solo para el sexo!- dije con asco.

- noo, nooo, basta.- al final metí mi miembro entre sus nalgas y allí el si grito de terror pensando que abusaria de el.

- NooNooooNooo- y lo quité para después empujarlo y que se golpeara con la cama.

Me acerqué e hice que tragara una droga para dormir.

Me vestí y salí de esa habitación con una sonrisa.

Excelente hijo!! La mafia es tuya campeón!

Fuimos a su oficina y firmamos lo correspondiente para traspasar el poder.

Luego me fui a dormir sin pensar en el momento horrible de ese joven.

.................

Me desperté y me di una ducha, estaba todo sucio, y a penas salí llame a uno de los guardias.

- ¿Donde esta el joven que me folle ayer?- dije con cara pervertida.

- Está en la misma habitación, a la tarde lo van a derivar a un burdel.- dijo.

- No, quiero que sea personal.- el asintió.

Volví a mi cuarto y agarre algunas pastillas para el dolor se cabeza y cuerpo.

Tomé camino en los largos pasillos hasta llegar a la sala de vigilancia y desconecte la cámara de esa habitación .
Luego fui al cuarto del chico, cuando entre había un olor tremendo a sangre, fluidos, hasta a orina.

Lo busque con la mirada y lo encontré desnudo y envuelto en una sábana en la esquina.

- Hey! Tranquilo, no te haré daño.- dije.

El comenzó a sollozar.

- Me llamo Farlan.- dije sonriendo.

- Me quiero ir. Por favor- dijo llorando.

- Escucha, saldremos de aquí, por qué está todo sucio, vas a ducharte, vestirte, te daré algo de ropa limpia.- dije acercándome.

Me miro aterrado pero de igual modo lo tome en mis brazos. Y salí de ese cuarto asqueroso, lo lleve al mío, y allí lo dejé en la cama.

- toma, seguro te duele la cabeza y el cuerpo.- dije tendiendo dos pastillas.

Las miro con desconfianza.

- no vas a dormirte.- dije entendiendo lo.

Las tomo con desconfianza.

- voy a prepararte la bañera para que estés más cómodo.- dije.

Me fijé que el agua este tibia .

- está lista.- dije. Él se paro y despacio entro al baño para luego cerrar la puerta.

Cambie las sábanas y busque la ropa mas pequeña que tuviera, luego entre al ante baño y le avise que estaba ahí la ropa.

A los 20 minutos más o menos salí caminando igual de despacio.

- recuestate, por favor.- dije.

Él se sentó en mi cama y lo tape con las colchas.

- ¿Por qué te haces el amable?- dijo enojado.

- No, lo soy, eschuchame bien, soy el jefe del clan mafioso Santod, para poder ascender a mi puesto actual y que el poder sea mio, devia violarte, tú eras mi víctima. Pero aunque no me creas, me dan asco las violaciones, no me parecen satisfactorias y a pesar de que eres atractivo y virgen, no soy quien para forsarte.- dije.

- pero me tocaste y manoseaste y cortaste.- dijo.

- Lose... Lo lamento, mis disculpas seguro no sirven de nada.- dije.

- quiero volver a mi casa.- dijo.

- no, no puedo permitir eso, te daré dos opciones : Puedes quedarte aquí, conmigo y fingir que me complaces o ir a un burdel - dije.

- Es injusto... Yo no hice nada.-dijo sollozando.

- Escucha chico, no soy una persona buena, ni tengo mucha paciencia, se que me porte mal, pero seré claro, estas metido en este mundo de mierda y yo solo puedo darte esas dos opciones por ahora.- dije.

- yo...yo... No lo sé.- dijo sollozando.

- Te dejare pensando hasta que vuelva del trabajo, a la noche, si no tienes una respuesta lamento que deberás ir al burdel, aquí solo te quedaras si estás dispuesto a no revelarte - dije.

Tomé mi saco y lo deje sollozando.

Pobre chico pero por el momento es lo único que puedo hacer.

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Narra Exequiel.

Jamás creí que mi vida cambiaría de este modo, soy un Omega abusado por un jefe de la mafia, que me está proponiendo ser su "puta" o prostituirme en un burdel.
No veré más a mis padres, ni a mis amigos.
Dios!! Estoy metido en la trata de personas.

Las horas pasaron y la puerta volvio a abrirse.

- ¿Decidiste?- dijo el pelirrojo.

Negué.

- lo siento, pero mis hombres vendrán por tu en cualquier momento.- dijo.

Negué de nuevo.

- Niño, lamento mucho todo esto pero es a lo que me dedico y no tengo tiempo para pensar en un niño.- dijo serio.

- ¿Debo....debo servirte en...en-

- ¿en el sexo?- dijo levantando una ceja.

- si..- dije avergonzado.

- No... Si tú no quieres No.- dijo.

- Me... Me quedaré.- dije inseguro.

- perfecto.- dijo.

- Escucha, a pesar de ser el jefe, tengo 2 días de mandato, y es obvio que ese poder aún me lo pueden quitar. Necesito, que cada ves que salgas de este cuarto, dicho sea de paso, este sera mi cuarto, cuarto en el que tú también dormirás, tú debes poner cara de niño abusado y violado, bueno, abusado... Abusado has Sido, pero violado no. Digamos que es como un acuerdo, mientras seas mi chico nadie va a tocarte y quién ose a hacerlo sufrirá y mucho.- dijo sonriendo.