"Sweetness"

Capítulo 15

Cuando mis ojos se encontraron con la furiosa mirada de mi padre, creí que podría esconderme debajo de la cama, porque su mirada daba miedo.

Y Chris parecía tan paralizado como yo.

Sabía que esto iba a suceder tarde o temprano, era inevitable, pero creí que tendría mas tiempo para prepararme psicológicamente.

—Esto… te lo dije Edgar, ¡te dije que no lo aceptaría! —exclamó, me encogí sobre mí mismo al escucharlo.

—Papá —empecé —, te pido que me escuches primero, por favor —pedí con la voz ahogada.

Miré a Chris y le rogué con la mirada que saliera de la habitación, el rubio negó de inmediato e intento acercarse a mí.

Negué con fuerza y me aparté, “por favor” le dije con mis labios.

Chris se mordió el labio indeciso, asintió y despacio abandonó la habitación sin mirar a mi padre.

Cuando el rubio salió, respiré profundo y rápidamente preparé mis siguientes palabras, debía ser cuidadoso, mi padre parecía una bomba a punto de explotar.

—Escucha, sé que… sé que esto no es lo que esperabas, sé que estas molesto con Dylan por estar y vivir con un chico, y lamento hacerte lo mismo, pero… n-no pude evitarlo, sucedió y ya… yo no esperaba ni quería tener una relación después de Lucy. Sabes que ella me lastimó y yo me cerré a este tipo de cosas, pero Chris llego y… no pude evitarlo, me gusta papá, me gusta mucho y lo lamento —esto último lo dije en voz baja mientras luchaba contra el horrible nudo en mi garganta.

Mi padre pareció enfurecerse aún más y empezó a respirar agitado mientras se acercaba a mí.

—Te lo dije Edgar, como… ¡como me haces esto tu también! ¡Los dos! ¡Mis dos hijos prefieren salir con hombres! ¡Revolcarse como maricas y yo…! —se detuvo y solo entonces me di cuenta que las lagrimas se estaban deslizando por mi rostro.

Sus palabras, su tono, su expresión dolían.

Dolían mucho.

—Lo siento —dije entre sollozos.

Mi padre se llevó una mano a la frente mientras caminaba de un lado a otro en la habitación.

—Yo… no quise decir eso, lo lamento, pero no puedo aceptar esto, Edgar no puedo… hijo —se acercó de nuevo y tomó mis manos entre las suyas que temblaban —. No puedes, aún estás a tiempo, termina con él, es lo mejor. Busca una buena chica, te lo advierto, tu vida será mejor, si no lo haces vas a ser marginado, vas a ser señalado, ¿Quieres eso?

Negué a sus palabras, no entendía la desesperación en su voz, se veía alterado.

—¡Por favor! No pude hacer nada por Dylan porque está demasiado lejos y Estefany no me lo permite, pero por ti si puedo…

—¿Por qué…? ¿Por qué no me aceptas así? ¿Qué es lo que esta mal? Y-Yo quiero a Chris papá, me hace sentir bien, es dulce conmigo y me hizo querer intentarlo, aun cuando pensé que no podría querer a nadie de esta forma de nuevo

—Pero una chica…

—¡No puedo salir con una chica papá! —grité desesperado —, ¡les tengo miedo! ¡me cuesta estar cerca de una! Mucho menos en plan romántico, ¿no lo sabías? Tengo un trauma con el género femenino, los nervios me invaden cuando estoy demasiado cerca de una, yo no puedo… —empecé a sollozar de nuevo con fuerza, mientras trataba de controlar mi respiración.

—¿Por qué no me lo dijiste? ¿Esto es culpa de tu madre y de Estefany? —preguntó entonces con desesperación.

—En parte, y no te lo dije p-porque temía tu reacción, creí que Grecia te lo diría algún día. Sabía que estarías decepcionado e incluso pensarías que era un idiota por tener un t-trauma tan estúpido —respondí entre jadeos.