Capítulo I.

8K 906 297
                                    

[   1 9 9 1 ]

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

[   1 9 9 1 ]

La vida para Coraline Theresa Potter fue muy dura, había perdido a su familia, a sus amigos, a su futura familia, y pensó que nunca podría remontar. Dumbledore le negó la custodia de su sobrino Harry diciendo que estaría en peligro con ella por los seguidores de Voldemort, y también veía lo afectada que la joven se encontraba en esos momentos, lo poco estable emocional y mentalmente que estaba.

Durante varios meses acudió a un grupo de ayuda muggle donde cada persona contaba cómo se sentía, qué le había sucedido. Al principio veía eso como un método que no le funcionaría y únicamente le haría recordar su desgracia. Pero poco a poco comenzó a abrirse, sin mencionar el mundo mágico, y sintió como al compartir sus emociones y vivencias se liberaba e iba afrontando cada día sabiendo que estaba rodeada de gente hermosa que luchaban a cada paso que daban por una vida mejor.

Y eso iba a hacer ella, empezar de nuevo. Dejar de vivir en el pasado y los "y si" y centrarse en un futuro para ella. Se dedicó a estudiar durante dos años en una academia muggle para adultos y realizó un examen para acceder a la universidad. Fue admitida para estudiar la carrera de psicología y años más tarde salió de allí con un título en la mano.

Coraline sabía que era hora de afrontar su pasado y regresó a la comunidad mágica, compró un piso en un barrio de magos y días después recibió una carta del director de Hogwarts ofreciéndole un puesto en la escuela para ser psicóloga y ayudar en todo lo posible a los alumnos.

Tras meditarlo durante varios días al final aceptó el puesto de trabajo y para ella es una de las mejores decisiones que pudo haber tomado. Le gustaba mucho su trabajo, al lado de la enfermería había una sala que servía como su consultorio y adoraba ayudar a los alumnos que sufrían tantos problemas (sacando a relucir su lado Hufflepuff). Estrés, ansiedad, tristeza, inseguridad, enfado, o no sabían cómo se sentían. Llegó a la conclusión de que los adolescentes son muy fuertes, sufren tantos cambios y tienen que aprender y adaptarse a tanto que su pregunta era ¿cómo pueden aguantar tanto? Nunca sabría la respuesta.

En ese mismo sitio conoció a su sobrino, Harry Potter, llevado sus primeras semanas en Hogwarts por Dumbledore, que se fue inmediatamente para dejar a ambos Potter. Era igualito a James y le sacó varias lágrimas el hecho de tenerlo frente a ella, después de tanto. El pobre pensó que había echo algo malo o que le ocurría algo al verla llorar levemente.

Señorita, ¿está bien? ¿Necesita algo?

No Harry, todo está perfectamente. Por como me has llamado supongo que no sabrás quién soy, no quiero alterarte así que te contaré todo poco a poco, siéntate por favor.

Ambos se sentaron frente a frente en los sillones y la pelirroja comenzó a hablar.

Lo primero que tienes que saber es que peleé mucho para que no fueras llevado a la casa de tus tíos, pero no conseguí nada. Yo quería que te quedaras con tu único familiar por parte de padre.

Pero aparte de mis tíos y primo no me queda nadie más en mi familia, ellos dijeron q...

Ellos te mintieron Harry, corazón, yo quería que te quedaras conmigo. Mi nombre es Coraline Theresa Potter y soy tu tía. Tu padre era mi hermano, somos familia. No sabes lo que he tenido que esperar para poder verte, hablar contigo y decir lo mucho que te quiero y te he extrañado muchísimo, no sabes cuánto pequeño.

Ambos estaban muy emocionales y el muchacho se dedicó a preguntar sobre sus padres, sobre ella y su familia. Al final antes de irse Harry miró a su tía.

Me tengo que ir ya pero... ¿Puedo abrazarte?

Eso enterneció su corazón y con una sonrisa se acercó al niño.

Por supuesto Harry, eso no tienes ni que preguntarlo.

Black & red || Sirius BlackWhere stories live. Discover now