Se Mía [Editando]

*Parte III*

Ho-hola Criaturitas del señor!...okno, eso sonó muy entre combinacion de HolasoyGerman y elrubius, pero buehh...da igual

Así que al punto, cumplo con lo prometido!!, ya hay cuatro votos en la parte anterior así que aquí les traigo la famosa parte tres!!

Que lo disfruten <3 <3

***

-Ahora sí que estoy en serios putos problemas-

-Pues..yo..yo- Mire sus ojos que esperaban por mi respuesta, a esos ojos que tanto amaba. Y...y simplemente me rendí, no pude mentirle, no pude hacerlo así, mirándola a los ojos. No a ella.

Suspiré y agaché la cabeza -Sí- Susurré apenas audible.

Cuando levanté la mirada, Martina ni se movía, tenía la mirada perdida, y no emitía ningún sonido.

-Pe-pero no lo de ser ...pa ...padre. Yo solo...solo sabía que iba a bares y..que a veces, coqueteaba con mujeres, no....no me contaba mucho tampoco- Traté de tapar un poco la culpa que comenzaba a provocarme un nudo en el estomago.

Pero claro, al ver que Martina a penas pesteañaba hacía mi dirección no ayudaba mucho a que la culpa cesara. Tampoco decía palabra alguna, solo se quedaba ahí, provocando al mismo tiempo que un dolor se expandiera en mi pecho y que un nudo en la garganta comenzara a formarse

-Pe-pero tienes que entenderme, es ..es mi hermano,..no...no podía..tra-traicionarlo.- Dije como pude, el nudo apenas me dejaba hablar correctamente.

Necesitaba,..no se..que me gritara lo..lo desgraciado que era o ..hasta verla llorar en mis hombros era una imagen menos dolorosa que ella, la que consideraba el amor de mi vida, hacer caso omiso de mi presencia solo por yo haber sido un estúpido y cubrir a mi hermano.

Entonces todo el dolor que sentía se transformo en pura desesperación en perder lo más preciado que tenía desde hace unos años. Sentir aquella angustia por el estomago y ver como la situación se te va yendo de las manos como si fuera arena, y uno desesperado no sabe como retenerlo a su lado.

Sentir que la has cagado y que existen posibilidades de que, con quien la has cagado, no te vuelva a hablar. Y además sumarle el hecho sentirte malditamente culpable por algo que pudiste haber evitado y tu como idiota que eres no hiciste.

¿A caso Martina creía que era capaz de engañarla para divertirme?,¿Me creía ella capaz?,¿Pensaba ella que yo era como Dani? No, eso no lo podía permitir.

-Háblame, por favor- Le suplique con los ojos.

Pero no, tampoco.

Quise llorar, sentí que la perdía por esta estupidez. No podría soportarlo, no de nuevo...

Pero es que,...¡Maldición!, ella simplemente no se movía y con cada segundo que pasaba más era el vacío que comenzaba a sentir.

Me pasé la mano derecha por mi pelo, despeinándolo más de lo que estaba, mientras me paraba del sillón y cuando estaba parado miré al techo y cerré fuerte los ojos, tratando de evitar que salgan las lágrimas.

La miré, ella seguía en la misma posición, me senté rápidamente frente a ella. La tomé de las mejillas, delicadamente, enfocando su mirada con la mía.

-Tini, por favor. Háblame. Necesito...que me digas algo, no puedes..simplemente...¡Joder!- Aparto la mirada porque las lágrimas amenazan con aparecer nuevamente. Vuelvo a enfocar mi vista en ella.-Solo dime algo- Susurro y fracaso al dirigir mi mirada a sus labios por una fracción de segundo.