Capitulo 20 7/7

1.3K 71 0
                                    

- Por favor, por favor, por favor, por favor no me hagas hacer nada extraño. Ya sabes, viniendo de ti… - 
- ¿Viniendo de mí qué? – dijo con una sonrisa en su rostro.
- Tú y tu forma de ser… tú. Eres extraño, te gusta la adrenalina, ¡A veces me das miedo! – el rio – Yo soy la típica chica delicada que no toca ni un plato… Tengo miedo de lo que me aras hacer.
- No te pediré que laves mi ropa, genio – me miro por unos segundos – Son simples cosas como… favores.
- ¿Favores? – repetí. El asintió – Por favor, nada de hacer cosas extrañas como pegarle a alguien porque no te dio su dinero o cosas así. Vi esto en películas, y no me agrada.
- ¿Qué películas?
- Uhm… yo… no lo sé, ese no es el punto – negué con la cabeza.
- Tranquila, no te are hacer nada arriesgado. 

No me dejaba tranquila. Sus palabras no me dejaban tranquila. ¡Por dios, él es Justin Bieber!


- ¿No tendré que limpiar tus pies o limar tus uñas, no? – pregunte aterrada.
- El soltó una carcajada – Eso es niñerías, y cosas de gay Selena… No soy gay y menos soy una chica.
- Me encogí de hombros – No sé lo que haces en tus tiempos libres.
- Sonrió por unos segundos mirándome – Algún día te enteraras si realmente soy una chica – dijo guiñándome el ojo.

Sentí como la temperatura subía a mi rostro. Mire hacia la ventana y tape mi cara con mi pelo. Oh dios, nunca me había sonrojado… Sabía a lo que se refería… 
Dios. Yo no quiero tener sexo con Justin Bieber. ¿Quién se cree que es? ¿Brad Pitt? ¿Leonardo Dicaprio? ¿Ryan Gosling?
No, no, no. Él era Justin Bieber, la persona más fría, seria del mundo.
¡Esperen! Frío… hoy no fue frio. Y tampoco fue serio porque se estuvo riendo.
¿Qué paso con el Justin que conocí? 


(…)


- Selena, actúas como si te mandara a cometer un robo – frunció el ceño.
- Me das miedo. No sé lo que pasa por tu mente.
- Nada – se encogió de hombros – Todavía no sé qué puedes hacer por mí. Puedes hacer mi tarea, pero eso no es lo que más me preocupa.
- Repetirás de año – 
- Se encogió de hombros – Conseguiré empleo.
- Si quieres conseguir un buen empleo tienes que terminar la universidad.
- ¿Y que si no quiero un buen empleo?... existen otros empleos con lo que podes ganar mucho sin tener la universidad terminada.
- ¿Cómo qué? ¿Traficante de drogas?
- Sí. Por ejemplo – dijo como si estuviera pensando en ello.
- ¡Bieber! – dije empujando su costado.
- Oh, nada de tocarme, Ángel – dijo riendo.
- ¿Ángel? – pregunte. El asintió - ¿A cuántas más le has dicho eso?
- Empezó a reír – Uhm… más o menos a unas cuarenta o setenta… 
- Mi sonrisa de desvaneció – Lo decía en broma.
- Yo igual… - empezó a reír – Debiste ver tu cara. Fue como si un fantasma hubiera pasado frente de ti. 
- Yo no quería saber sobre eso.

(…)

- Mamá – grite cerrando la puerta detrás de mí – La llegue. 

La silueta de mi madre salió de la cocina. La observe bien, parecía asustada o nerviosa… Pero, ¿Por qué? 


- ¿Qué ocurrió mamá?
- Tu padre… - murmuro cuando por fin estaba frente mío. Ambas caminamos hacia el sofá y nos sentamos allí. – Él estuvo aquí preguntándome por ti. Le dije que estabas en la casa de una amiga tuya, me pregunto de quien y no le dije… - suspiro y bajo la mirada. La tome de las manos y le di un apretón. ¿Para que él quería verme? – Me dijo que no se iría hasta que tú llegaras, quería hablar contigo… Paso al baño y ahí fue cuando me llamaste. 
- ¿Cuándo se fue?
- Hace un rato.

(…)


- Hola enana – sentí como unos brazos rodeaban mi cuello. Reí y me separe de su agarre, me puse frente de él y rodee los ojos. 
- ¿No te cansas de molestarme? – le saque la lengua mientras caminábamos por los pasillos de la escuela.
- No – negó con la cabeza- Por cierto, ¿Por qué tienes esa gorra en la cabeza? – frunció el ceño.
- Con esto nadie me reconocerá… ¿Qué pasa si todos se acuerdan del papelón que hice el viernes?
- ¿Papelón? Yo no lo llamaría así… - rio –
- ¿Por qué no? Estaba borracha…No recuerdo lo que paso exactamente pero debí haber hecho un papelón. 
- ¿Él no te lo conto, cierto?
- ¿Quién no me lo conto? – fruncí el ceño confundida.
- No importa – dijo moviendo sus manos en señal de no importancia. 

Antes de que pudiera decir algo. Sentí como unos brazos rodeaban mi cintura, y de un solo movimiento unía sus labios junto a los míos. Abrí los ojos para ver quién era, cuando unos que conocía perfectamente se conectaron con los míos… Trate de alejarme de él golpeando su pecho para librar su agarre sobre mi cintura, pero el tomo mis brazos y los coloco sobre sus hombros. Volvió a tomar mi cintura pegando su cuerpo junto al mío.
¡Mierda! Por más que quisiera separarme no podía… Esos labios. Dios, besaba tan bien.

TE ODIO... PERO TE AMO → Jelena 【Adaptación】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora