These Charming Men {Marrissey}

London

Una vez que Johnny y Mike lograron reconciliarse producto del accidente, la banda compró los tickets de tren a Londres en la estación Picadilly.

Johnny trajo de por sí una guitarra acústica y unos cigarros para entretenerse en el viaje, que duraba alrededor de 6 horas, por lo que iban a tener mucho tiempo libre para ensayar o escribir canciones.

Andy por su parte, trajo un bolso que contenía paquetes de heroína y un walkman para escuchar música.

Milk se contentó con unas revistas y dulces que compró en la estación.

Moz en cambio, trajó un cuaderno para anotar las letras que se le ocurrieran, "La Importancia de Llamarse Ernesto" de Oscar Wilde y la maqueta.

—Chicos, este será un trayecto largo así que tendrán todo el tiempo del mundo para hacer lo que quieran.— le dijo Moz a la agrupación.

—Vale, voy a dispararme un caballo— dijo Andy sin escrúpulos.

Moz lo miró con disgusto y se volteó para no verlo.

—Oye, tranquilo, no es cómo si fuera a hacerlo en medio de toda la gente— le recriminó Andy, y se dirigió al baño del vagón.

—Ignóralo Mozzy— le aconsejó Johnny.

—Nunca entenderé a los yonkis.

Milk contemplaba la escena sigilosamente escondido detrás de la revista.

Andy se demoró un buen rato en el baño, llevando a especulaciones de los otros.

—¿No le habrá pasado nada malo?— preguntó Johnny preocupado.

—Quizás está ahorcando el ganso— respondió Moz sarcásticamente.

Johnny se rió y Milk lo ignoro.

—¿Milk, estás bien tímido hoy, eh?— lo increpó Moz.

—Lo siento, es que, no es fácil hablar de eso para mí.— confesó.

Moz y Johnny lo miraron preocupados.

—¿Pero han conversado alguna vez del tema?— preguntó Johnny consternado.

—He dialogado muchas veces con él— le respondió Milk. —Él siempre me lo promete, que se va a limpiar, que va a dejar las malditas drogas, y al rato después...

Milk no alcanzó a terminar el relato pues justo Andy salió del baño.

—¿Y qué novedad tienen?— interrumpió Andy para sorpresa del grupo.

—Oh, pensabamos que habías tenido una sobredosis— le reveló Johnny.

—Pff ¡eso no es nada! Otras veces me he demorado hasta una hora incluso— dijó Andy, bastante regocijado.

Moz y Milk pretendieron que nada había ocurrido y Johnny sacó de su bolsillo una cajetilla de cigarros.

—¿Quieres uno?— le preguntó a Andy.

—No, por el momento no.

Johnny empezó a fumar y Andy puso su Walkman, y pronto Moz tuvo la primera inspiración para una nueva canción.