Monster | LOKI LAUFEYSON

CAPITULO 14

( ACTO DOS; CAPÍTULO TRES)
Asgard 

Cuando regreso al castillo, volvió con Frigga. Rhyfedd sabía que muchas cosas no le convenían, pero percibía a la reina un poco triste, más de lo habitual. Ahora no se quedaron en los aposentos de la reina, estuvieron recorriendo el pueblo de Asgard.

La bruja se sentía relajada cuando acompañaba a la mujer, y era mucho decir, sabiendo que apenas llevaba dos días en ese mundo, pero la personalidad de Frigga, como bien le dijo a Loki, le recordaba a los únicos dos roles que tuvo en su vida.

— ¿Y no sabes algo sobre tu don? — le cuestiono la diosa pasando uno de los pasillos.

— No mucho, su majestad — respondió Rhyd, haciendo un gesto dubitativo — Sé que una antepasada fue maldecida por una bruja, otorgándole el don solo a las mujeres de la familia. —

— ¿Cómo el mito de la desaparición de Freyja? — pregunto la reina alzando una ceja y observando a la chica que iba a un lado suyo.

— Si — y recordó todo lo que Loki le había dicho cuando pidió respuestas — Pero no creo que sea Freya —

— Oh, cariño, Freyja nunca se rebajaría a eso — exclamo con un leve atisbo de diversión en la frase, sacándole una media sonrisa a Rhyd — Los Vanir detestan a los Aesir, no nos llevamos bien, y la verdad, no veo a Freya lanzando una maldición. Si la diosa murió fue por su propio orgullo —

— Entonces, ¿quién habría lanzado aquella maldición? — pregunto ahora confundida la bruja.

— Hay una tierra, que no pertenece al Yggdrasil, y se rige por sus propias reglas y parlamentos. — comenzó a platicar Frigga, llevando a Rhyd por una estancia llena de estanques — Goneim se llama, y sus dioses son tan poderosos como los de Asgard. Sus tierras son prosperas y diversas, teniendo como habitantes ángeles, brujas, magos, protegidos y semidioses. Si alguien maldijo a tu familia, debió de ser una bruja de Goneim — informo.

Y eso capto la atención de la mujer, una tierra llena de brujas. ¿Ahí estarán sus respuestas? Ahora Rhyfedd ansiaba el día en que podrá ir a Goneim. Sin darse cuenta, ya rezaba por ello.

— ¿Y cree que todas mis dudas se responderán en Goneim? — cuestiono, ahora con un montón de preguntas surgiendo en su pequeña mente. 

— Rhyfedd — le llamo por su nombre, distrayéndola de sus pensamientos — Todos tenemos preguntas, y siempre las tendremos, pero creo que las respuestas que estas buscando, realmente no se resolverán en Goneim. Y te doy un consejo, checa tu pasado, tal vez ahí encuentres mas repuestas de lo que creías —

Eso si la dejo con un ceño levemente fruncido, ¿tendría razón? La azabache ya no sabía que creer, ni que pensar y mucho menos a quien rezarle para que le sacara sus dudas. Suspiro hondamente pero saco una sonrisa, ahora no es tiempo para ello, intentaría disfrutar todo el conocimiento que la reina le podría dar. 

Entonces, Rhyd saco otro tema de conversación, empezaron a divagar en otras cosas interesantes, mas que nada en el ámbito de la magia y hechicería, deduciendo la azabache que el manejo de poderes es diferente en Asgard al de su hogar.

Noto que Frigga se alegró cuando hablaron de ese tema, por lo que la mantuvo en esa conversación hasta que dieron con Thor, y cabe decir que Rhyd se sorprendió al verlo muy cerca de una mujer alta, de cabello castaño largo y vestía ropa de Asgard, aunque su vestido no era tan elaborado como el que estaba usando, y en ese momento sintió que tal vez llamaba mucho la atención.

Al parecer Thor hablado sobre algo relacionado con Odín, diciendo que esté no era tan sabihondo como se sospechaba.

— Que no te escuche diciendo eso — interrumpió Frigga aun con el brazo enredado al de Rhyd.

Ambas bajaron unos escalones, acercándose a la pareja, las dos portaban una sonrisa sin mostrar los dientes.

— Jane Foster — dijo el rubio, tomando las manos de la castaña sobre las de él — Te presento a Frigga, reina de Asgard y mi madre — y eso alejo a la mujer, asustada y sorprendida a la vez, murmurando un leve hola.

Frigga la miraba divertida, viendo de reojo a Rhyd quien saco una media sonrisa como burla por la reacción de Jane.

— Y la mujer que la acompaña es Rhyfedd Dwyer — la presento el príncipe de Asgard — Peleó junto a mi en Nueva York y está aquí como la cuidadora de Loki —

— Y también como investigadora — aclara la bruja, captando la completa atención de la aterrorizada Jane — Quiero expandir mi conocimiento sobre la hechicería — exclama con una sonrisa — Y la reina es una gran fuente de información y secretos, así como una gran persona —

— Gracias, lady Rhyfedd — dijo la reina con toda el alma.

Despues de aquella presentación, los cuatro se dispusieron a platicar. Ahí Rhyfedd se enteró que Jane es una científica de la Tierra y que se conocieron con un incidente provocado por Loki hace como dos años en Nuevo México. La bruja no se sorprendió cuando mencionaron el hecho, pero se preguntó cuando tiempo llevaría Loki sintiéndose de esa manera, desplazado y con solo el objetivo de tener la corona.

Sin embargo, después de un rato, unas alarmas extrañas comenzaron a sonar; obteniendo la atención de los cuatro, más que nada de Frigga y Thor, reconociéndola de inmediato.

— Las prisiones — dijo la reina al aire.

— Loki — contesto Thor, y había dado un paso hacia adelante, pero hubo algo que lo retuvo de correr.

— Anda — le dijo su madre, sabiendo que le diría — Yo cuido de ella — y con eso, el dios de trueno se fue corriendo.

Solo que, dentro de Rhyfedd, había algo que le molestaba mucho, como si algo fuese a suceder. Solo esperaba a que estuviera equivocada, y que todo esto es una falsa alarma. Pero más que nada, esperaba que Loki no es el que provoco aquel escándalo. Rezaba a todos los dioses por ello.