XXXI

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Clarisse.

—Prima, los niños están contentos por el viaje.- habla Madison a mi lado

—Me alegra .- sonrío falsamente

Al parecer no se ha enterado de nada sobre Verónica y Brad. Mucho menos que odio con todo mi ser a Verónica y ese bebé.

Las invité a Colombia falsamente para poder robarle su pasaporte.

—¿Pero tienes pasaporte? ¿Cierto? .- preguntó preocupada

—Si, los niños lo tienen venezolanos porque nacieron acá y yo si tengo el mío colombiano.

—¿Puedo verlo? .- preguntó sonriente

—Pero Claro, Clarisse .- comienza a buscar su pasaporte

—Es que es mejor verificar si todo está en orden, tu sabes. Por si está vencido.

Madison abre un cajón de su cómoda y busca entre sus papeles el pasaporte.

—Pero yo no creo que esté vencido, lo saque hace dos años .- habla entregándome el pasaporte

Observo su pasaporte y sinceramente en esta foto tenemos un parecido increíble.

—Aun tiene ocho años de vigencia .- hablo entregándole el pasaporte —Entonces mañana mismo saco los pasajes para irnos.

—Pero mañana es muy rápido. Me toca ir a pedir permiso al colegio de los niños y todo .- habla preocupada

—Bueno, hay que pedir permiso ¿cual es el problema? Mientras usted va, yo compro los pasajes y nos vamos.

Asiente con su cabeza y sonríe nerviosa. Admito que a Madison no le gusta todo el mundo del narcotráfico en el que estoy involucrada.

—Déjeme el pasaporte, yo compro los pasajes con esto.

—Mejor lo dejo ahí con los de los niños y usted después lo saca de ahí.

Me arrebata el pasaporte y lo guarda nuevamente en el mismo lugar.

—Si, yo lo saco de ahí .- la miró malvadamente

—¿Quiere un café? Están dando ganas como de uno.

—Bueno .- sonrío amable

—Entonces espéreme, ya se lo traigo.

Al comprobar que salió de la habitación me levanto rápidamente y saco el pasaporte del lugar donde lo guardo.

Tomo mis cosas una vez que Madison sale de la casa junto a sus hijos.
Dejo una breve carta encima de la cama para excusar mi desaparición.

Le dejo tres fardos de billetes como agradecimiento por el pasaporte y sonrío bajando las escaleras.

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Llego a la peluquería y me acerco a la señorita.

—Buenas tardes, Bienvenida.

—Gracias, es que mira esta soy yo cuando tenia el pelo largo .- Le muestro la foto del pasaporte de Madison. —Estoy cansada de este pelo corto y quería saber si tienes una peluca o extensiones. No se, algo parecido a esto.

—Si claro, pase adelante tenemos varias .- habla amable

Camino a paso seguro con mi maleta y llego hasta las pelucas.

—La más parecida es esta .- me muestra una del color del cabello de Madison.

—Si, esa. ¿Puedo dejar esto aquí?

" MALA CHICA"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora