Día -32, 12:23 h.
Recoge flores en la pradera.
Margaritas, azucenas, amapolas.
Tan diferentes,
Y a la vez tan preciosas.
Él la observa alejado.
Ojalá las cosas no fueran así, piensa
La vida es cruel,
Pero es vida.
Ella ya ha terminado un ramo.
Se acerca a él y le susurra
No quiero perderte.
Nunca lo harás, mintió.
46 horas más tarde vería la mentira en sus ojos azules
Y se daría cuenta que ya había visto esa mirada antes.