Tú y yo somos dos,
dos almas, un reflejo
y un espejo.
Ella llama a tu mirada
y se cuela en nuestra cama,
pero ella, sobra y hiede.
Hiere mi alma y duele mi calma,
usurpa mi felicidad y desbroza
mi alegría.
Ella sobra y no es bienvenida,
pero tú, cobarde, la invitas cada día.
Sé valiente y dale puerta,
saca su espectro de nuestro
planeta.
Porque tú y yo somos dos.
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Salvajes. Por un puñado de poemas
RandomEn proceso deconstructivo/constructivo, espero la opinión de los atentos lectores para ir dando forma a esta historia, cada día se modifican los poemas y se añaden nuevas partes. **Propongo un juego: 1-¿Quién narra las historias?¿Quién es la voz de...
