Marte - La nueva civilización

Capítulo 1: Shock

- ¿Qué tal el día Kolo? ¿Algo productivo que merezca la pena contar? – Interpeló Rely de un modo grosero pero habitual.

- Nah, como todos los días. El jefe me ha "pedido" que me quede 20 minutos más en el trabajo y ahora acabo de llegar a casa. – Apuntó sin tratar de ocultar su fatiga. – ¿Tú qué? ¿Hoy has movido el culo del sofá?

- He acabado la animación de Shefry, esa bebida de glutamato que te comenté, así que te puedes imaginar... - A lo que añadió. – ¿Oye, te vienes a casa? Quiero enseñarte una cosa.

Kolo, asintiendo rápidamente, dio por entendido el mensaje. Los asuntos de información oscura no se pueden tratar por la red neuronal ya que todas las sesiones son registradas con el fin de obtener datos de la población. También sirven para prevenir cualquier ataque al sistema o a las instituciones.

- Voy. – Acto seguido abandonó la sesión.

Kolo subió los dos pisos hasta la planta 19 i picó a la puerta. Escuchaba a Rely al otro lado del metal y vio que se encendía la luz de la cámara de seguridad. Todas las casas tienen estos dispositivos de seguridad, pero Rely es especialmente cuidadoso con las medidas que se toma.

Me pregunto qué es lo que quiere enseñarme. Tal vez haya descubierto más a cerca de las minas de cuarzo del cráter Davis. Tal vez sepa ya donde envían y para qué usan el cuarzo extraído. Veamos...

Se abrió la puerta después de quitar las 5 cerraduras. Rely es un chico de 23 años con un aspecto muy dejado, siempre lleva la misma ropa y nunca se afeita. Es delgado y huele bastante mal según Kolo.

Kolo entró a su casa sin decir una palabra hasta que su amigo le puso el inhibidor de red neuronal. Rely fabricó dos hace 5 años para poder hablar con su amigo sin necesidad de preocuparse por los registros de la base de datos del Gobierno. Al ser hecho con sus propias manos, el casco tiene un aspecto bastante aparatoso.

Kolo siempre ha admirado a Rely por ser extremadamente listo pese a su corta edad. Tiene 20 años más y cada vez que cruza la puerta de la casa de su amigo tiene la sensación de completa ignorancia.

- Aquí me tienes. Muéstrame. – Expresó impaciente y nervioso.

- Verás... - Dijo en tono preocupado mientras ponía rumbo hacia el salón. – He encontrado algo muy grave... No sé ni por dónde empezar.

- Tu siéntate y cuéntame. – Dijo Kolo intentando pausar a un nervioso Rely.

- A ver... Hace un par de días conseguí entrar por fin en el servidor de Inteligencia y Seguridad Marciana. La cosa es, que he estado indagando, y he encontrado documentos clasificados en los que se habla de exterminio de ciudades enteras...

- Espera. ¿Exterminar a quién, a nosotros? No tiene sentido.

- No hablo de nosotros, hablo de la Tierra. El Gobierno quiere dejar atrás el planeta, le supone una carga innecesaria. – Kolo permaneció en silencio, helado. - Según estos documentos, el colapso en la Tierra fue producido por un exceso de población todavía vigente. Parece ser que los recursos naturales se agotaron por completo y la gente que todavía vive ahí está condenada a la extinción. – Expuso con un inusual estrés. – Es decir, la construcción de la colonia Marciana fue un plan de escape desde el inicio. Ahora que el nuevo modelo social ha cuajado, van a acabar con el Terrestre.

Kolo, incapaz de pronunciar ninguna palabra después de esas declaraciones, se evidenciaba claramente en shock. La conservación de la milenaria sociedad Terrestre era un hecho incuestionable hasta este preciso instante.

Dada la categoría del descubrimiento, ambos decidieron pasar toda la noche revisando dichos documentos con tal de conocer más acerca del Programa Focus.

- Final del segundo capítulo -