Asexual ⇔ HyunIn

№07

Mi cerebro no procesa el significado de Hiatus, sorry.

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Hyunjin tomó el rostro del menor entre sus manos. Lo obligó a levantar la mirada para verlo a los ojos y la garganta se le cerró al notar lo hinchados y rojos que estaban.

La noche anterior había salido. Solo quería beber y olvidar por un momento el lío que se volvían sus pensamientos y sentimientos. Bebió de más y terminó peor de lo que era en un inicio.

Bajó su cabeza lo suficiente como para que sus frentes quedaran pegadas y aspiró el dulce perfume de su novio.

Hace unas semanas juraría no necesitar nada más que su aroma para vivir. ¿Por qué ahora se volvió tan egoísta que no le basta con sólo eso?

Siguió tomándole de la barbilla y su boca se posó delicadamente sobre uno de sus ojos.

Se había prometido no lastimarlo. ¿Qué estaba haciendo?

Absorbió una pequeña lagrima y siguió depositando besos por la curva de su nariz. Bajó hasta casi llegar a su boca pero se detuvo y subió un tanto para solo llegar a besar su frente con cariño.

—¿Qué pasa? —preguntó y Jeongin no respondió. Solo se lanzó a abrazarlo con las pocas fuerzas que tenía. Cuando su abrazo fue correspondido de la misma manera, hundió su cabeza en el pecho de Hyunjin y se quedó inmóvil sin intenciones de soltarlo.

¿Qué pasa? Él también quería saber que pasaba. No entendía nada. No entendía porque ayer, luego de que Seungmin se fuera, se encerró en su habitación y encendió el estéreo tan alto que ni siquiera él podía escuchar los gritos que desgarraban su garganta.

—Todo estará bien, ¿verdad? —volvió su atención a los profundos y confundidos ojos de el castaño. Las manos de Hwang ascendieron temblorosamente hasta las mejillas del menor. Acuno su rostro y asintió numerosas veces sintiendo como su corazón se rasgaba en cada afirmación. —¿Pero yo estaré bien, Hyunjin?

El mayor tomó una pausa para recuperar la respiración y sus músculos vibraron alrededor de sus huesos. —Yo me encargaré de eso. —sus labios descendieron hasta estar muy cerca de su frente, rozándola con su cálido y dulce aliento. —¿Quieres qué me quede está noche?

Notó como Jeongin seguía temblando unos segundos más para luego sonreír. Con la sonrisa más triste que jamás vió en alguien.

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—Realmente pensé que no volverías más —la gruesa voz le hizo levantar la mirada del suelo.

No volveré más.

Su cuerpo se movió solo cuando Félix lo invitó a pasar. Se sentía cómo en su propia casa. Cosa que le preocupaba.

Ya sentado en la sala, sus ojos no dejaban de pasear por toda la enorme habitación. Necesitaba enfocarse en otra cosa. Lo que sea. Menos en la delgada figura de pie frente a él.

—¿Tienes hambre? —el tono insinuante de el rubio lo puso alerta. Lee elevó las cejas y dio algunos pasos hacía delante con una sonrisa traviesa dibujada en su boca.

Hwang retrocedía lo más que podía hasta dejar su espalda pegada al respaldo del sofá. Félix quiso tomarlo del cuello pero HyunJin se libró de sus brazos levantándose de golpe.

—Félix, quiero hablar… —su voz salió como un suspiro y su respiración se aceleró cuando el rubio soltó una carcajada.

—Pero si nosotros no hacemos eso, Hyunjin... —se acercó rodeando los hombros del más alto con sus delgados brazos. —Eso no es divertido. —chasqueó, lamiendo la línea de su mandíbula y descendiendo con mordidas. Lo escuchó suspirar y apretar un poco los dientes. Ese era su pase de salida.

El castaño quiso sostenerle pero Félix soltó el agarre, alejándose y ahogándose en risas. Cuándo vió que volvía a intentar atraparlo, salió corriendo hacia las escaleras.

Subió a todo pulmón, al mismo tiempo que HyunJin lo seguía y no tardaba en atraparlo, tomándolo del antebrazo para envolver su espalda con los brazos. Abrió una de habitaciones del segundo piso, tirando del joven consigo para luego empujarlo dentro de ella.

—¿Quieres que hablemos aquí? —la voz burlesca resonó en el oscuro cuarto. Aúnque Hwang no le dio importancia.

Sus manos corrieron por su cuerpo y atrapó su labio inferior entre sus dientes, estrujándoselo un poco para empezar a desabotonar la camisa y quitársela al tiro. Se separó para buscar aire, pero los labios de Félix se presionaron contra los suyos al instante.

El rubio llevó su mano hacía el cuello del más alto empezando a deslizarla por todo su pecho mientras que con la mano libre desabrochaba los molestos jeans.

—¿No crees que aquí está muy oscuro para hablar? —Lee sonrió y HyunJin miró los rellenos labios, casi anhelándolos. Cómo si pudiera leer su mente, Félix lo besó, mientras metía la mano dentro del elástico de sus bóxers, aferrándola a su miembro de golpe. Hwang liberó un sonido rasposo por todas la emociones que lo embargaban.

Félix sabía exactamente que hacer y eso lo enloquecía. Cada vez que veía los labios de el rubio, caía.

Estaba jodido, pero se sentía bien estar jodido; al menos de esa manera. Se sentía bien mientras no pensara mucho en que estaba haciendo. Se sentía bien mientras no pensara en la calida voz de Jeongin diciendo; te amo.

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Les doy vía libre para odiar a HyunJin cuanto quieran...

Gracias por leer(? ♥️

Ahora si ya me voy de
Hiatus <3