Estúpido John® |COMPLETA| en edición.

C A P I T U L O 7

Jessica.

—La nueva amante del joven corredor de NASCAR— Carly lee el encabezado de la revista de la empresa para la que trabajamos —Y espera a ver las demás revistas y secciones de chismes.

—Ya eres una celebridad— exclama Leyre riendo.

—Dejen de burlarse— les ordeno —esto es muy estresante.

Mi idea era mantenerme alejada de la prensa amarillista luego de mi fracaso amoroso con un famoso, pero las cosas no siempre salen como lo planeo.

— ¿Y de que hablaron durante su comida?— pregunta Carly

—De cosas— exclamo un poco convencida.

— ¿Y de qué cosas?— cuestiona Leyre

—Sobre su entrenamiento — respondo— y lo que pasó la otra noche.

—Solo eso— Cuestiona Carly.

—Si, solo eso Carly.

Las chicas no dejan de acosarme con preguntas, porque estoy en la portadas de varias revistas ellas saben que soy yo puesto que les avise que saldría con John.

—Pero ya basta de hablar sobre mí y mis decisiones — me quejo levantándome del sofá —¿Cómo les fue a ustedes?— les pregunto.

Camino hasta mi refrigerador y saco una caja de donas con glaseado. —Yo quiero— exclama Leyre arrebatándole la caja a Carly.

— ¿Cómo te fue con Malcolm?— le pregunto a Carly

—Hemos dejado las cosas por la paz— responde con una mueca.

—Bandera blanca bien pensado— exclama Leyre con la boca llena.

—Fue la mejor decisión— le animo.

— ¿Y qué piensas hacer con John?— pregunta Leyre.

—No quiero hablar con el— exclamo a la defensiva—Solo dejemos las cosas en el pasado.

— ¿Le has pedido la entrevista?— Pregunta Carly quitándole la caja de donas a Leyre.

Hago una mueca de disgusto—aún no— respondo.

Hemos hablado lo suficiente pero siempre me olvidó de pedirle una entrevista,  se que al pedirle la entrevista deberá de verlo y una parte de mi no quiere dejar de verlo.

— ¿Y qué es lo que esperas?— pregunta Leyre.

—No sé cómo pedírselo— me excuso.

—Puedes decir algo así— opina Leyre —Hola John soy Jessica, una entrevista a cambio de sexo.

— ¡Leyre!

—No es tan mala su idea— interviene Carly.

—No haré eso.

Está bien que haya tenido sexo en un buen tiempo, pero no estoy tan desesperada para ir y ofrecerme a John, porque bueno no estoy tan desesperada.

Por favor que Ley no salga con una de sus tonterías en este momento.

Por favor.

—Bien, pero dinos querida Jess— sonríe de manera pícara— ¿Qué tan bueno es en la cama?.

Mis suplicas no funcionaron muy bien que digamos.

—Ley deja en paz a Jess— defiende Carly —Pero admito que tengo curiosidad por saber.

—No ayudas mucho Carly— gruño.

John y yo vivíamos juntos en un pequeño apartamento cerca de la universidad donde solía estudiar, lo cual implicaba pasar demasiado tiempo juntos.