Chico Rosita » Jeon JungKook (+16) [TERMINADA]

Prólogo [FANFIC EN EDICIÓN]

— No me miren así— bufa el moreno de hoyuelos, terminando por elevar una ceja— Sobre todo ustedes dos; JiMin y TaeHyung— menciona, alzando su mentón para señalarlos.

Esta vez Seok asintió de acuerdo, sin dejar de comer por supuesto y, por otro lado YoonGi sólo se remueve en su lugar, con la babita saliendo de su boca rosadita.

A los menores se les sube la sangre a las mejillas, sintiéndose avergonzados por un segundo; mientras que por otro lado, JungKook acomoda sus lentes de montura redonda sobre el puente de su nariz, agradeciendo con la mirada a su amigo de cabello violeta.

— Si a JungKook le gusta o no el mismo bando, vale; y si no, entonces también nos da igual— argumenta— ¿Acaso piensan prenderle en la hoguera?— pregunta retórico— Simplemente no es su problema— termina por decir el chico, volviendo su atención al libro.

Luego de un silencio inminente donde sólo se escuchaba los sorbos de SeokJin al comer de su delicioso ramen; los menores comienzan a quejarse.

— Se callan si no quieren que yo mismo lo haga— los amenaza YoonGi con un gruñido de por medio, levantando su rostro de entre sus brazos apoyados sobre la mesa— Primera y última advertencia.

Apenas lo escuchan, el par de jóvenes asintieron con temor; ya que las amenazas de YoonGi eran las del mismo demonio encarnado.

Al parecer todo se había resuelto de una manera pacífica.

Pero al día siguiente las cosas tampoco mejoraron para JungKook.

La 95 line del pequeño grupo auto denominado como "Bangtan", no dejaban en paz al pobre chico.

— Es que no podemos evitarlo, te portas como una florecilla, JungKook— se burla JiMin, dejando ver unas traviesas líneas en lugar de sus ojos.

El castañito suspira con pesadumbre, agachando su cabeza antes de morder su labio inferior con impotencia. No les daría el gusto, piensa el menor mientras que se acomoda sus gafas. Por el momento era mejor ignorarlos, ya que sus mayores todavía no habían llegado a la mesa donde siempre se reunían.

Vuelve a levantar su cabeza cuando desde su lugar pudo apreciar el bullicio de un grupo de chicas que bromeaban entre ellas; riendo como que si no hubiera un mañana. Había una en especial que se reía como foca con retardo, dando aplausos mientras que su cuerpo se iba hacia atrás; pareciendo una convulsión.

Aquella persona se llamaba Kwang DaeHyun, la chica nueva que tenía de amigos a medio instituto.

Pero lo más sorprendente, era que aquella muchacha de carácter risueño no era nada más ni nada menos que la capitana del equipo femenino de baloncesto; una verdadera joya del deporte en su instituto.

Mientras que a él ni siquiera le gustaba sudar, ugh

La única vez que estuvo lo suficientemente cerca de los asuntos de DaeHyun, fue aquella vez en una clase de educación física; donde sus amigas la sermonearon por tener una "actitud de macho", que además asustaba a los chicos;

"¡La mayoría de ellos te miran como un chico más de la banda, no como a una mujer!"

Suspira.

Vaya, que al parecer él no era el único con ese tipo de problemas.

Desde el punto de vista de JungKook; su mayor era una persona bastante bonita y amable. Sin embargo también podría hacerte una llave si la hacías enojar, puesto que la pelinegra era una chica ruda.

Así que, en resumidas cuentas; la mayoría de los estudiantes masculinos le tenían miedo, o incluso sentían cierta rivalidad contra sus dotes deportivos (que era lo más seguro). Además de eso, en las duchas del colegio había escuchado un par de veces a los hormonados del instituto hablar sobre mujeres; y cuando su nombre era pronunciado, todos estarían de acuerdo en que, en vez de tener una linda novia; DaeHyun parecía ser más bien como un mejor amigo poseyendo el cuerpo de una mujer.