La Criminal. Tercera Parte.

Capítulo 37. Cool Kids Don't Dance.

—Me tocó una persona sumamente especial, quien está y estará en mi corazón siempre. -Se me escapa una sonrisa- Estoy tan agradecida por haberlo conocido que no me imagino mi vida sin ti en ella. -Volteé a ver a Louis- Tommo.

Louis sonríe de oreja a oreja mientras todos aplauden. Se pone de pie a abrazarme y recibir su regalo.

—Sonrían. -Nos pide Gunner al apuntarnos con la cámara, volteamos a sonreír- Perfecto.

—Espero te guste. -Digo con una sonrisa-

Todos ansiosos para saber qué es lo que esconde la envoltura. Estira en sus manos una chaqueta blanca, donde detrás viene un bordado de un carro bajo las estrellas y la luna, y en grande dice "Plain White T's", la banda favorita de Louis.

—No es cierto. -Dice incrédulo mientras sus ojos se iluminan de felicidad- ¡Gracias ______! ¡Es preciosa! ¿Dónde la has encontrado?

No tarda ni un segundo más en ponérsela, nuestros amigos le chiflan y le aplaudan como un modelo de pasarela. Le queda bastante bien.

—Joder gracias ______, es el mejor regalo que me pudiste haber dado.

Sonreí satisfecha a sus palabras.

—Aún hay otra cosa más. -Digo al señalar la bolsa de regalo- Recuerda que es doble regalo por tu cumpleaños.

—Louis siempre sale ganando, no es justo. -Se queja Max en broma-

Desenvuelve una taza negra, donde viene escrito "Cool Kids Don't Dance" en grafiti. Se le borra la sonrisa que portaba como niño en juguetería mientras pone atención en la taza. Todos fruncen su ceño extrañados ante su reacción. Él está atónito.

—¿Cómo... ¿Dónde.. -Se traba en sus preguntas-

—Yo se la regalé a Zayn. Así que supe a dónde volver.

Zayn tenía la misma taza, se la regalé en su cumpleaños, la adoraba, y también Louis, siempre que la veía se la quería robar y le preguntaba que dónde la había adquirido.

—Gracias ______. -Dice Louis al tratar de no quebrarse en el llanto- Gracias.

Louis prosiguió con su regalo a Liam. Liam a Harry, que le regaló un suéter de su estilo y un disco de música que quería (con mi ayuda). Harry a Jacob le dio una botella muy prestigiada de tequila y un libro que había querido. Jacob le dio a Niall, que nos cayó a todos como sorpresa debido a que, no sé si ya olvidaron que ellos rompieron su lazo de amistad gracias al secreto de ser policía de Niall, creo que ahora se llevan un poco mejor, pero nada a comparación como antes. Pero vaya que lo sigue conociendo, Niall es bien conocido por adorar los calcetines alocados, pues varios pares fueron su regalo, junto con unas playeras. Niall terminó el intercambio dándole a Henrie.

—Hmm... Hmm. -Aclara Louis su garganta en voz alta, pega en su copa con un cuchillo para captar nuestra atención y obtener nuestro silencio- Me gustaría decirles algo.

—No tienes porqué admitir que soy el más guapo del grupo. -Dice Niall- Ya lo sabíamos Tommo. -Reímos-

—Que chistoso, idiota. -Dice Louis- Es algo más interesante que el rostro de Horan. -Reímos de nuevo- Es algo que he mantenido en secreto por unas semanas y no había tenido el valor de decirlo en voz alta.

Todos se voltean a ver extrañados, menos Harry, Gunner y yo que claramente somos los únicos que sabemos. Louis está nervioso, y se nota al tronar sus dedos y ver constantemente a los ojos a Gunner. Gunner se pone de pie para pararse junto a él, todos prestan atención absoluta.

—Gunner y yo estamos juntos. -Dice Louis al tomarlo de la mano- Y nos queremos demasiado.

—¿¡Qué!? -Soltó Liam-

Max comienza a ahogarse con el vino que tomaba.

—No me jodas. -Suelta sorprendido Chad-

—¿Esto es una broma? -Pregunta Henrie-

—Bienvenido al club. -Dice Travis al darle un beso en la mejilla a Jacob-

—Yo también quiero confesar algo. -Habla Henrie- Estoy secretamente enamorado de Jake.

Soltamos la carcajada, Jake le hizo una seña obscena.

—¡Felicidades! -Dice Harry para apoyarlos-

—Se ven adorables. -Dije también como un cumplido-

—¡Sigo sin poder creerlo! -Se exalta Liam- ¿Por qué no me lo habías dicho hijo de puta? -Le pregunta a Louis-

—Esto si no lo vi venir. -Dice Niall aún sorprendido-

Louis y Gunner se encargaron de aclarar dudas por unos buenos minutos.

Pasamos a la exquisita cena, vino y brindis por doquier. El postre fue un delicioso pastel de chocolate. Después ayudamos a recoger y limpiar la mesa, claro, aún sin guardar el alcohol, esto iría para largo y apenas son las 11:00 p.m.

—Entonces ahí estábamos todos. -Cuenta la historia Henrie en la sala, todos estamos atentos- En la casa del enemigo tratando de hacer las pases. Aunque todo era mentira, llevábamos botellas de alcohol como cortesía, con veneno para deshacernos de ellos.

—Por favor no cuentes esta historia. -Pide Max, todos comenzamos a reír-

—Déjame terminar. -Pide Henrie- Entonces estábamos claramente tomando de cualquier otra cosa que no fuera lo nuestro. Hasta que de repente llega este idiota. -Señala a Max- Muy alegre; "Este whisky tiene algo que está buenísimo". -Imita su voz- Y claramente se estaba tomando el veneno.

Soltamos la carcajada, incluso Harry y Gunner.

—¿Y qué hiciste? -Le pregunta Harry a Max-

—Tuve que salir de la fiesta con Chad para que me ayudara a vomitar en el estacionamiento. -Responde y volvemos a reír- Ríanse, ríanse. -Se defiende, aunque a él también le quiere ganar la risa-

Toc, toc, toc.

Volteamos a la puerta. Tres golpes secos que han callado el ambiente solo dejando la música. Fruncimos nuestro ceño, ¿Quién toca en Nochebuena a las once de la noche en el bosque? Exacto, nadie.

Toc, toc, toc.

Vuelven a tocar.

Automáticamente todos nos ponemos de pie y sacamos nuestras armas silenciosamente.

—Tranquilícense todos. -Pide Harry en voz baja, quien menos quiere que lleguemos a la violencia-

—Sabía que algo malo pasaría. -Comienza a negar Henrie con su cabeza histéricamente-

—Primero verifiquemos quién es. -Dije obvia antes de hacernos ideas-

Toc, toc, toc.

—¿Quién es? -Se atreve a preguntar Liam-