¿Quién dijo que sería fácil? / Jacob Black y tú. [Terminada]

(78) Te necesito como el aire para vivir.

Me costaba mover la muñeca, lo cual suponía que estaba rota, aunque el dolor de espalda y estómago era soportable.

Llegamos a casa de los Cullen, Jacob me ayudó a bajar y cuando intenté andar me dí cuenta de que tenía el tobillo derecho tocado.

Jacob pasó mi brazo bueno por sus hombros.

-P-puedo c-caminar.

Justo entonces perdí el equilibrio, Jake me agarró a tiempo y me tomó en brazos cual una princesa.

Estaba más serio de lo normal y eso me preocupaba.

Entramos al salón donde me sorprendí al ver tantos vampiros, pude notar como Jacob se tensaba.

Reconocía a algunos de ellos, como Zafrina, Senna, Garrett, los Aquelarres de la última vez y varios nómadas más, en cambio algunos no los había visto en mi vida.

Carlisle y Esme nos vieron al instante y se acercaron a nosotros.

-Oh dios mío. -Exclamó ésta.
-Vamos a la enfermería. -Dijo Carlisle.

Una vez allí Jacob me tumbó en una camilla con delicadeza, Carlisle comenzó a mirarme.

-¿Quien te ha hecho todo esto?
-Cayo..

Jake miraba al suelo con la mandíbula apretada.

-Tienes rota la muñeca izquierda, contusiones en la espalda y estómago y no te has roto el tobillo derecho de milagro.

Genial.

Carlisle parecía nervioso, más bien asustado, y no llegaba a entender bien su reacción.

-Y has sufrido un fuerte golpe en la cabeza, miraré cuidadosamente que no sea muy grave.

Después de media hora aproximadamente de sufrimiento, Carlisle terminó.

-Bien, tus huesos se recuperan más rápido que los de un humano normal pero tampoco se a qué velocidad.
-¿Podré luchar?
-Prob...
-No. -Le interrumpió Jacob.
-No voy a quedarme de brazos cruzados mañana.
-___ apenas puedes mantenerte es pié, no vas a luchar. -Dijo Jacob firmemente, de acuerdo, le ocurre algo.

Bufé y miré a Carlisle.

-Ahora descansa un poco, aún no es medio día. -Me dijo.

Me quedaría a ayudar pero realmente estaba cansada, seguiré las órdenes de Carlisle y a la tarde trataré de ayudar.

Asentí y traté de levantarme, Jacob se aproximó a mí para pasar mi brazo por sus hombros y ayudarme, no negué y acepté su ayuda.

En el jardín divisé a Liv jugando con Benjamín utilizando su poder para hacer formas con la arena.

-Luego estarás con ella, ahora descansa, no querrás que te vea así. -Contestó Jacob como si supiera lo que pensaba.

Suspiré y asentí, nos montamos en el coche, en todo el trayecto nadie dijo nada, lo que me estresaba.

Llegamos a nuestra casa, tranquila y vacía.
Jake me ayudó a sentarme en la cama y así hice.

-¿Estas enfadado? -Solté.
-No. -Su respuesta, fría y seca aumentaron mis ganas de gritarle.
-¡¿Qué demonios te pasa?!

Sin darme cuenta estaba de pié delante de él, mi pié vendado comenzó a arder, pero no le dí importancia.

Éste pareció sorprendido ante mi repentino ataque y se giró brucamente, quedando cara a cara.

-¿¡Como que qué me pasa!? ¡Podrías haber muerto! -Alzó la voz.

Me quedé callada mirando su rostro, lleno de furia pero sobretodo de preocupación y lamento.

-Yo...

Pareció que iba a disculparse pero no le dejé acabar, fuí hasta él para hundir mi cabeza en su pecho rodeando su espalda con mis brazos.
Él correspondió al instante estrechándome con fuerza junto a él.

-Tenía muchísimo miedo. -Habló en un hilo de voz. -Miedo de que fuera tarde y perderte... no me perdonaría en la vida si te hubiera pasado algo aún más grave allí....

Sin dejar de abrazarle me separé de él lo suficiente para ver su rostro, una lágrima caía por su mejilla mientras luchaba por no dejar caer las demás.

Alcé mi mano y retiré esa lágrima con suavidad.

-No debí haberlo ocultado, pero temía que os hicieran algo.

Jacob me apegó más a él y pegó su frente a la mía, subí ambas manos a sus meijllas sin importar la muñeca vendada.

-No podría perderte, te necesito como el aire para vivir...

Puse una pequeña sonrisa y con delicadeza junté mis labios con los suyos, disfrutando del aroma que proporcionaba y la suavidad de sus labios, me correspondió retirando un mechón de pelo de mi rostro para llevarlo detrás de mi oreja.

-Te amo Jacob Black.
-Y yo a tí ___ Swan.

Volvió a unir nuestros labios, fundiéndolos en un tierno beso, sonreí a mitad de él recordando que ahora su apellido también me pertenecía.

[...]

-¡___!

Benjamín se acercó a mí.

-Benjamín. -Me acerqué para abrazarle.
-¿Qué te ha pasado? -Preguntó viendo mi cuerpo vendado.
-Los Vulturis...
-Mañana van a pagar por todo lo que han hecho.

Todos parecíaan decididos a luchar, lo cual me angustiaba aún más.

Seth estaba cuidado de Liv, debo admitir que lo de su imprimación al momento no me hacía mucha gracia pero me he dado cuenta de que lo que quiere es su felicidad, y que daría lo que sea por ella.

En el caso de ella, no podía arriesgarme a que ella muriera, a que estuviera en manos de esos malnacidos, le pedí a Bella un par pasaportes y DNI falsos, tambíen estoy preparando una mochila repleta de dinero y suministros, aún no puedo hablarle a nadie de esto, y esta vez lo hago con consciencia, solo Bella está protegida de los poderes de Aro.

La casa de los Cullen estaba repleta de vampiros, más que hace un rato incluso, pocos de ellos tenían poderes especiales.

Ya le dije a Jacob que no iba a quedarme de brazos cruzados mientras que todos daban su vida por nosotros, a él no le agradó la idea pero no volvió a rechistar, me pidió que usara lo máximo que pudiera mis poderes para no tener que luchar cuerpo a cuerpo.

No sabía mucho de lucha pero Jasper me ha enseñado lo necesario y he prácticado con él varias veces.
Con lo que debíamos de tener más cuidado era con los poderes de Jane y Alec, pero Bella y yo podíamos contrarrestarlos.
Felix y Demetri son expertos en lucha, iríamos a por ellos primero, ya que Cayo está muerto.

Un escalofío recorrió mi cuerpo al recordar su nombre, pero me alivió saber que su existencia ha terminado...

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¿Que tal? Espero que os esté gustando, ya sabéis que siempre me gusta leer vuestra opinión !!

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