Y si te digo que no, miento

Dos días

-¿Cuándo será eso? - preguntó Jon viéndola extrañado. 

La castaña hizo una mueca. 

-Para mi cumpleaños. Bueno... por la noche -mordió su labio, nerviosa. 

-¿Richie lo sabe? - la miró con ternura. Desde que llegó a trabajar con ellos que el líder de la banda había notado cierto acercamiento entre ella y su amigo y compañero de banda. Después de todo él había sido que trajo a Abigail a trabajar con ellos. 

Abigail bajó su mirada. 

-No... yo... ems... se lo diré esta noche - lo miró - sólo quería avisarte a ti - sonrió - ya sabes, tu eres el jefe - soltó una poco sincera carcajada. 

Jon rió. - Sabes que no habrá problema - posó su mano sobre su hombro - realmente que desde que Richie te presentó has sido magnifica en el trabajo -le dio aquella característica sonrisa de él - lograste ordenar el desastre que nuevamente estaba saliéndose de control - rió. 

Abigail sonrió. Conocer a Richie y luego a la banda, había sido lejos una de las mejores cosas  que le había sucedido, el poder compartir con aquella estrellas de rock que realmente de estrellas eran todo pero que la humildad y sinceridad con la que se tomaban todo los hacía fantásticas personas. 

Abbi salió de la motorhome del cantante con una mezcla de alegría y nostalgia. Los días se acercaban y debía decirle a Richie que volvería a su ciudad. Pero por alguna razón aquello sólo le provocaba un fuerte dolor de pecho y un nudo en la garganta.

[...]

Llegó a casa con los ánimos por el suelo y con un leve dolor de cabeza. 

-¿Está todo bien? - preguntó su amiga al verla llegar y tirar sus cosas sobre el sofá. 

Abigail suspiró.

-Sólo quedan dos días

la morena volteó a ver a su amiga, y se forzó a sonreír. 

-Que tal si asaltamos un banco y tú te quedas aquí y enviamos una copia tuya 

Abigail rió - esa es una linda forma de decirme que me extrañaras 

Cata rió para luego suspirar y apoyar su cabeza en el hombro de su amiga. 

-Nunca me presentaste a Jon - bromeó. 

La castaña rió.

-Extrañaré esto - suspiró - a los chicos y tu poco tacto y dificultad para expresar tus sentimientos - rió - 

-¿Y Richie? - alzó su cabeza para observarla. Sabía lo que se significaba el guitarrista para la castaña. 

Abigail sonrió. 

-También...

Pasaron lo que quedaba de día entre películas, conversas y risas. Después de todo también eran sus últimos días juntas. 

Eran cerca de las 8 de la noche cuando la puerta sonó. 

-Ya sabía yo que se te habían quedado las lla... - sus palabras se cortaron al ver al guitarrista parado afuera del departamento con un ramo de jazmín- Richie... 

El moreno encogió sus hombros. 

-En realidad no sé por qué me has ignorado durante todo el día de hoy pero te traje jazmines - estiró el ramo. 

Abigail sonrió - me encantan - las oloroso. - pasa - se hizo a un lado.

-Yo... realmente me gustaría saber el por qué me has ignorado durante todo el día de hoy - soltó una vez dentro, y que Abbi había ido por un jarro para las flores.