Magic Stuff

Remus Lupin

Las épocas navideñas eran algo que todos esperaban con ansias por distintas razones, las clases se acortaban un poco debido a las bajas temperaturas, el desayuno y la cena eran delicias navideñas y dentro de pocos días irían a sus casas por unas vacaciones.

Además de esto los colgantes clandestinos de muerdago eran la atracción principal de parejas y aspirantes a tener una y sino a los que sus amigos arrastraban para que tuviera un poco de acción navideña. Remus no fue la excepción.

- Esto es estúpido.- Remus confesó con fastidio al escuchar como sus amigos planeaban hacerle otro "recorrido" por el pasillo.

-Tú eres estúpido.- se defendió Sirius.- Nuestro plan es fantástico.

Remus rodo los ojos y decidió que lo mejor sería olvidar el tema y regresar a terminar de leer la tarjeta que había traído su rana de chocolate.

- ¡No nos ignores,Lupin!- insistió James, el cual estaba sentado en el sillón en frente de él.- Está vez te aseguro que te gustará el recorrido.

-¡No hacemos ningún recorrido!- Remus soltó la tarjeta y miro a sus tres amigos.- Lo único que hacen es llevarme a cada lugar donde hay un muerdago colgando y preguntarle a la chica más cercana si me quiere besar.

-Las paradas la mayoría del tiempo son entretenidas, Lunático.- hablo Peter al morder un pedazo de regaliz.- A mi me han resultado algunas veces.

La frustración de Remus se hacía cada vez más evidente, ya no encontraba la forma de decirle que no a sus amigos tercos que no aceptan que ninguno de los cuatro pasen la navidad sin alguna pareja o ligue.

Este año Sirius tenía a Marlene, James a Lily y Peter a una chica de Slytherin que Remus no recordaba muy bien el nombre, tal vez sería Connie Mars o algo así.

-Estoy bien, ¿comprenden?- explicó con calma.- No necesito a nadie por los momentos.

-Hagamos esto, una última parada y se acaba todo,¿trato?- ofreció Sirius poniéndole una mano en el hombro.

Los tres lo miraron impacientes, secretamente sabían que aunque dijera que no seguirían insistiendo en buscarle pareja.

-Muy bien, pero es todo.- sentenció Remus.

Antes de que pudiera articular otra cosa James y Sirius lo sujetaron por ambos lados e hicieron presión en el agarre asegurándose de que su amigo no escapara, Peter en el proceso agarro su suéter y el de los otros tres, hacía frío afuera.

Pasaron minutos hasta que encontraron el lugar indicado, la mayoría de los puestos donde guindaba el muerdago estaban ocupados y, para un contratiempo del plan, la persona que buscaban no estaba a la vista.

-¿Ven que esto es inútil?- se burló Remus.- ¿Ahora me pueden soltar para que vuelva a la sala común?

- No, sé paciente. - le asegiro Peter, cambiando la posición de los abrigos al otro brazo para poder darle unas palmadas en la espalda a su amigo.

Al cruzar la esquina Remus se sorprendió al ver a la única persona que creyó que sus amigos jamás sabrían que tenía sentimientos por está, tú.

A veces me pregunto si por los que tengo de amigos son espías o algo parecido, pensó Remus.

-¡Taran!- le susurró Sirius emocionado.

-¿Ahora si te gusta la idea?- le dijo Peter.

Peter se sentó en un banco cercando y disfruto de la escena,muy pronto fue acompañado por James el cual se cruzó de piernas, apoyo su brazo en la que estaba arriba y luego apoyo su cabeza en la palma de su mano.- Ve por ella, tigre.- lo entusiasmó fingiendo una vocecita más aguda.

Remus miró a sus tres amigos, Sirius ahora sentado al lado de James.-¿Es enserio?

- Sí.- le aseguró Sirius- Ahora ve con ella y enorgullecenos,campeón.

Remus rodo los ojos y fue al lugar designado, resignado por las insistencia de sus amigos, sin embargo, emocionado de encontrarte debajo del muerdago.

- Hola...- dijo tímido, escondiendo sus manos en sus bolsillos.

- Hola, Remus.- le devolviste el saludo mientras ponías un mechón de pelo detrás de tu oreja.

-¡Ya besala!- escucharon como unos de los chicos gritaban. Ambos fueron nerviosos.

-Oh Merlín, esto es un desastre.-se murmuró Remus pasado las manos por su cabello.

- Sí...- admitiste.- ¿También te trajeron aquí,no es así?

Remus te miro directo a los ojos, soltó una risa nerviosa y luego una sonrisa.- Mis amigos son un verdadero dolor de cabeza a veces.

-Te diré que.- te acercarse a él y le susurraste en la oreja.- Nos vemos en las tres escobas este sábado y dejamos que las cosas fluyan, así de esta forma es...raro,¿trato?

- Trato.- accedió Remus. -Nos vemos ahí entonces,(t/n).

-Así será, Remus.- le dijiste al irte, no sin antes darle un beso en la mejilla.

••••
¡Perdón por haber tardado tanto!

No he tenido casi tiempo en esta semana con los ensayos para mi coreografía para pasar de nivel ( si a alguien le interesa creo que la pase).

Les espera una semana de navidad con todas las cosas cursis que vienen con eso <3